FID 5 convierte a San José en epicentro internacional del diseño

El FID sacude la capital con 15 invitados de reputación mundial, una feria con 60 diseñadores, muestras en museos y fiestas

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L o que pasa en el mundo de la creatividad se ve en el Festival Internacional de Diseño de Costa Rica . Por quinta vez, San José abre una vitrina a las tendencias del diseño gráfico, la publicidad, la moda, el diseño industrial, la animación, la gastronomía y otras disciplinas en sus principales voces.

Del 12 al 14 de marzo subirán al escenario de la Antigua Aduana figuras como la diseñadora de modas Ágatha Ruiz de la Prada, el ilustrador Joan Cornellà y el fotógrafo Marcos López. Desde ese podio, se dispersan ondas de inspiración convertidas en exposiciones en museos y otros centros culturales, una fiesta gastronómica en barrio Escalante y una feria de 60 diseñadores en la Casa del Cuño (contiguo a la Antigua Aduana), llamada Espacios FID.

Marcha. Paco Cervilla y Alfredo Enciso, dos de las cabezas del festival, detallan que el FID ha dejado de ser solamente de diseño y ahora se trata de creatividad e inspiración.

“Milton Glazer, uno de los mejores diseñadores del mundo, dijo acá el año pasado: ‘El diseño es pasar de una condición existente a una mejor’. Se está hablando de diseño, pero no vienen a dar una conferencia de cómo se hace un logo. Vienen a contar procesos creativos, anécdotas de su vida personal, su filosofía de vida”, explica Cervilla.

Muchas veces, los invitados hablan de cómo definir una voz propia; otras, de cómo atreverse a defender proyectos personales que nadie cree rentables y hacerlos funcionar. “Estamos convencidos de que el diseño es una herramienta que puede transformar la sociedad y mejorar la calidad de vida”, dice Cervilla.

Para los organizadores, esta dinámica motiva a emprendedores locales, y recuentan experiencias de personas que cambiaron de línea de negocio a otra propia y satisfactoria tras una charla.

Por ello, aumentaron los talleres: este año son 19, incluyendo tipografía, stop motion y administración de empresas. “Surge de la necesidad de generar espacios más íntimos con la gente y los invitados”, afirma Enciso.

“Tratamos de abrir espacios lo más posible para que la cadena empiece a girar porque es un motor económico. Está apenas en fase embrionaria, pero las posibilidades económicas que tiene son enormes”, añade su colega.

Este año, atraerán a unos 500 asistentes de 14 países; para el FID, es parte de su misión de posicionar a San José como destino de turismo cultural. “Calculamos que entre $320.000 y $340.000 se quedan en San José durante los tres días”, estima Cervilla.

La fiesta abarcará el Paseo Gastronómico La Luz (los restaurantes en barrio Escalante), el parque Francia, el Museo de Arte y Diseño Contemporáneo, el Instituto de México, el Centro Cultural Español y otros.

El cierre estará a cargo de Dengue Dengue Dengue, en Vértigo, el sábado. Las actividades están en la página de Facebook del FID .

En Espacios FID ( abierto del 11 al 14 de marzo ), se da oportunidad a diseñadores nacionales y de Centroamérica. “Muestra cómo ha ido creciendo el gremio de emprendedores creativos. Para ellos, se ha convertido en una de las ferias más importantes del año”, considera Enciso.

Este año, los organizadores del FID también afrontaron una polémica inesperada. Cuando publicaron en Facebook una imagen del invitado Renzo Garibaldi, cocinero y carnicero del restaurante Osso de Lima, empezaron a recibir docenas de comentarios negativos. Para muchos participantes en este foro, no era ‘adecuada’ la presentación de un carnicero en el encuentro. ’Nosotros no lo veíamos venir. Al final de cuentas, es el trabajo de él. Es una manifestación más de gastronomía; lo que pasa es que tiene que ver con la carne. Hubo gente que se sintió molesta, pero no fue, obviamente, sin esa intención que lo trajimos’, respondió Cervilla. En Facebook, algunos comentaristas incluso llamaron a boicotear el evento. ‘Es un festival de ideas abierto a todas las manifestaciones creativas. Es considerado uno de los chefs más innovadores a nivel mundial. Tenía un local pequeño de carnicería y lo transformó en una experiencia gastronómica’, se defendió.

Desde hoy, San José es un estudio abierto: entre, vea, aprenda y salga a cultivar su creatividad.

La entrada preferencial vale $130 en preferencial, $100 en general y para estudiantes $80, con acceso a conferencias, talleres y fiestas los tres días del Festival. Se pueden comprar en www.fidcr.com