El Fotoclub enseña sus mejores fichas

Muestra repasa el trabajo anual en 83 imágenes de 42 fotógrafos

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Abra bien sus ojos y aventúrese a dar un paseo por espléndidos escenarios naturales, por los recovecos de la arquitectura urbana o por los senderos desconcertantes de las imágenes abstractas.

La 25ª exposición anual del Fotoclub de Costa Rica propone un reto visual en 83 fotografías captadas por el ojo creativo de 42 artistas.

Las obras se exhiben en la Galería Nacional (Museo de los Niños) y fueron seleccionadas por medio de los concursos regulares y especiales realizados por el Fotoclub durante el año.

Según explicó el presidente del Fotoclub, Henry Jones, esta muestra ofrece variedad tanto en los temas como en los enfoques que cada fotógrafo da a sus obras.

“En algunas imágenes, se pueden apreciar los efectos que producen las sombras arquitectónicas; también hay fotografía documental acerca de nuestros labriegos sencillos, fiestas patronales, paisaje urbano, rural y escenarios naturales”, declaró Jones.

Además hay un sala dedicada a la fotografía en blanco y negro.

En la exposición, destacan las tres obras que fueron designadas como la“fotografía del año” en cada una de las tres categorías: color, blanco y negro y libre.

Excelencia. Un sábado de agosto, cuando el sol apenas despuntaba y la capital se desperezaba, el fotógrafo Marco Vargas “arriesgó el pellejo” en busca de una buena imagen. Él quería destacar el edificio de la antigua Botica Solera, en barrio México, en medio de la soledad de la mañana antes de que las calles se congestionaran de automóviles.

“Esta es una de las entradas más auténticas de San José y ese edificio le da cierta elegancia a esa zona. Tomé la foto muy temprano en la mañana, pues quería que el lugar estuviera despejado. Aproveché que todavía no había carros y me ubiqué en media calle; la verdad, me la jugué”, relató Vargas.

El único que apareció en medio de esa desolación fue un hombre que llevaba un bollo de pan en la mano. El esfuerzo de Vargas valió la pena, pues El pan de cada día fue designada la fotografía del año en la categoría libre.

Por su parte, las obras De pie y Reflejado , ambas del fotógrafo Luis Alonso Jiménez, son las mejores fotografías del año en las categorías color y blanco y negro, respectivamente. La primera de ellas muestra la imagen de un hombre en un parapente, reflejada en un edificio. Fue tomada en el distrito de Miraflores, en Lima, Perú.

“Ahí hay un centro comercial construido en un acantilado y es una zona muy popular para practicar parapente. Logré captar esa imagen en el momento justo: la luz era muy buena y el edificio me ofrecía una textura especial”, dijo.

El fotógrafo explicó que la obra De pie fue tomada en una piscina con una cámara sumergible y resistente agua. “Lo que buscaba era una perspectiva inversa, entonces la persona realmente está acostada bajo el agua, pero al girar la imagen 180 grados, se crea la ilusión de que está de pie”, detalló.

El reconocimiento de fotógrafo del año recayó por sétima vez en Juan José Pucci, y la fotógrafa revelación fue Ana Cristina Montoya.

La muestra se exhibe hasta el 31 de julio en horario de lunes a viernes, de 8 a. m. a 4:30 p. m., y sábados y domingos de 9:30 a. m. a 5 p. m.