Un abuelo que cuenta historias sabe hacerlo como ningún otro. Para sus nietos, nadie hablará como él, nadie modulará su voz para imitar a sus fascinantes personajes y evocar sus recuerdos más cálidos. Los nietos de Chan Jae Lee recordarán sus trazos y colores.
Cuando todos vivían cerca en Brasil, adonde el señor Lee había llevado a su familia en 1981, él llevaba a los dos niños de su hija a la escuela, comía con ellos y los sacaba a pasear. Pero su hija decidió mudarse a Corea del Sur.
Con 75 años, el señor Lee se aburría ahora. Su hijo, Ji Lee (diseñador de comunicación en Facebook) lo convenció de dibujar para distraerse; su mamá podía subir las imágenes a Instagram. Pero, ¿para qué?
“Creo que no entendía por qué tenía que dibujar”, dijo Ji Lee, en una entrevista telefónica. Cuando nació el hijo de Ji, Astro (ambos viven en Nueva York), volvió a intentar convencer a Chan Jae: ¿y si subía los dibujos a Instagram y su madre escribía sobre ellas?
“No disfrutaba dibujar en sí, ni entendía por qué las publicaría en Instagram, no creía que nadie las disfrutaría”.
Pero Ji Lee lo convenció de dibujar y su mamá subía las fotos a Instagram. Lee contó la historia de sus padres en un video en diciembre; más de 250.000 personas siguen ahora, día a día, la fascinante y colorida obra de Chan Jae Lee.
‘El punto de giro ocurrió cuando nació mi hijo’, dice Ji Lee. ‘Entonces vio que sí tenía un propósito, una audiencia: sus tres nietos. No le veía sentido a dibujar por dibujar. Aprendió a usar Instagram, arreglar las fotos, usar herramientas para editarlas... Algo importante es que está acostumbrado a la regla de subir un dibujo por día. Eso es importante porque, sin importar cómo maneje su proyecto, tiene que dibujar algo’.
Esta semana, con motivo del sétimo Festival Internacional de Diseño, se expondrán por primera vez en un espacio artístico, el Museo de Arte y Diseño Contemporáneo (en el Centro Nacional de Cultura, San José).
Cariño. Ha sido un largo e inesperado viaje. Ji Lee recordaba que su papá dibujaba, y lo convenció de que así podía comunicarse a la distancia con su familia. “No creo que él disfrutara dibujar cuando era joven, pero a veces lo hacía para mi hermana y yo. Nunca estudió dibujo ni fue a una escuela de arte, pero tenía mucho talento”.
Tras casi dos años, Chan Jae Lee ha dibujado de todo: paisajes, recuerdos de su niñez, retratos de sus nietos, su visión de las noticias mundiales... y gana miles de fans.
“Gran parte del tiempo, pensaba que sus dibujos no eran buenos. Su idea del gran arte eran pintores famosos como Picasso, Van Gogh y Cézanne”, dice Ji Lee. “Hay cierta cualidad de pureza y honestidad en sus dibujos. A la vez, técnicamente, él es muy hábil y su trazo es muy seguro”, considera el hijo.
Cuando el proyecto se hizo viral, en diciembre, se dio cuenta de que mucha gente empezó a seguirlo y a leer sus comentarios. “Esta atención le dio confianza. Ahora que estuvo en Nueva York, me dijo por primera vez que había cambiado de opinión: sus dibujos están bien tal como son, aunque no pueden compararse con Picasso”, explica el hijo.
El proyecto terminó por unir a la familia, que se comunica todos los días. Drawings for my Grandchildren se expondrá en Nueva York y Sao Paulo. En cientos de mensajes, los fans le dicen a Chan Jae Lee que los inspiró a hablar con sus propios padres. “Empezó siendo para tres nietos y ahora está inspirando a mucha gente. ¡Eso es increíble!”, celebra Ji Lee.
“Esperamos que esto también inspire a personas de todas las edades que tengan pasión, un talento, a hacer algo”, dice Ji Lee. “Además, si usas la tecnología para expresar tu pasión y compartirla, pueden ocurrir grandes cosas”.
El artista coreano Chan Jae Lee exhibirá su primera muestra en un museo en la Sala 1.1 del MADC (ubicado en el Centro Nacional de Cultura, antigua Fanal, en San José). La muestra reúne selección de 80 imágenes hasta ahora solo publicadas en Instagram. Estará abierta hasta el 25 de marzo en horario regular del museo, de 9 a. m. a 5 p. m. Su hijo, Ji Lee, participará en el encuentro FID Lado B.