De casa de sustos a casa de lujo

Una intervención de emergencia rescató el inmueble de su destrucción

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Hace tres meses, la Casa Jiménez de la Guardia, en San José, se parecía más a la guarida de Drácula que una mansión josefina de principios del siglo XX.

Esta elegante dama de concreto armado y ladrillo se pavonea de nuevo con su gracia de antaño luego de una intervención de emergencia realizada por el Centro de Patrimonio del Ministerio de Cultura.

La cirugía reconstructiva para devolverle a la señora de 106 años su belleza y jovialidad costó ¢100 millones. Fue un paquete completo que incluía restauración de fachadas, reconstrucción total de la estructura del techo, reforzamiento estructural, restauración de ornamentos, cambio de canoas, reparación de verjas de hierro forjado y aplicación de pintura.

Diseñada por el arquitecto italiano Francesco Tenca, se terminó de construir en 1905 y es la única residencia de estilo arquitectónico art nouveau que sobrevive en el centro de San José, 75 metros al norte del cine Variedades.

La restauración se extiende al inmueble contiguo, conocido como Edificio Maroy el cual fue construido en fecha posterior (probablemente cerca de 1920) con un diseño arquitectónico ecléctico; es decir, que combina varios estilos, entre ellos barroco y neoclásico.

Primer paso.Según declaró el director interino del Centro de Patrimonio Adrián Vindas, esta es solo una primera etapa y las intervenciones realizadas fueron las necesarias para evitar que la casa terminara en el suelo.

Y es que según la Ley de Patrimonio Histórico Arquitectónico de Costa Rica N.° 7555, los propietarios de un inmueble con declaratoria tienen la obligación de “conservar, preservar y mantener adecuadamente los bienes”.

Sin embargo, la propiedad –que comprende tanto la casa Jiménez de la Guardia como el edificio Maroy– se encuentra desde hace dos años en medio de un litigio y todavía debe definirse el proceso de sucesorio entre sus propietarios.

El director de Patrimonio informó de que su institución está en conversaciones con autoridades del Banco Popular, entidad que podría adquirir la casa para completar su restauración.

Sin embargo, el Departamento de Comunicación Corporativa del Banco Popular informó de que las gestiones están en una fase preliminar y por el momento no se referirán al tema.

La casa Jiménez de la Guardia fue la residencia en donde habitó el abogado y diplomático costarricense Manuel Francisco Jiménez Ortiz y su familia.

Ahí vivieron sus descendientes hasta que fue desocupada y se alquiló para fines comerciales en la década de los 80.

Posteriormente, fue abandonada y desde entonces dejada a merced de las inclemencias del tiempo y el vandalismo. Actualmente, el inmueble aparece inscrito en el Registro Nacional a nombre de Maroy Sociedad Anónima.

Mientras tanto, la señora de buen ver queda a la espera de unos millones para una renovación extrema también por dentro.

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