A partir de este fin de semana, las paredes sur y oeste del edificio principal de la Asamblea Legislativa despliegan un colorido y movimiento inusuales respecto a la solemnidad asociada a ese recinto de los diputados.
Las pinturas, dibujos y grafitis fueron realizados por 12 artistas –11 costarricenses y un alemán– como parte del proyecto De tu barrio a mi barrio, que consiste en una gira de intervenciones artísticas en el espacio urbano por siete países de Centroamérica y el Caribe.
La iniciativa es promovida por el Goethe Institut de Alemania, y en Costa Rica fue respaldada por la Municipalidad de San José y la Asamblea Legislativa, como parte de las actividades del festival cultural Transitarte 2012.
Sin embargo, algunas informaciones difundidas en medios de comunicación destacaron la polémica alrededor del mensaje que expresan estas obras por supuestamente ser “ofensivas” para algunos diputados.
“Esta es la Asamblea Legislativa de Costa Rica y aquí el respeto debe imperar. No deben sustituirse con grafitis las paredes blancas que han mantenido la seriedad y la sobriedad de la Asamblea”, declaró el diputado liberacionista Víctor Hugo Víquez a Noticias Repretel.
Al ser consultados por La Nación,, algunos de los artistas participantes negaron que detrás de sus obras haya mensajes cifrados de ofensas hacia los legisladores.
Todos ellos concuerdan en que la interpretación de una creación artística es libre y por eso puede tener distintos significados para cada persona. “Una buena obra de arte es aquella que desencadena la reflexión y la discusión, pero cada quien puede leer ideas diferentes”, opinó el artista alemán Jim Avignon, responsable de coordinar el trabajo de los artistas en cada país.
Avignon explicó que el concepto detrás de su pintura es el contraste entre la cara que los seres humanos mostramos a la sociedad y la realidad que llevamos por dentro.
“En la superficie las personas aparentan que todo anda bien, pero en nuestras mentes desfila un circo de preocupaciones e inquietudes. Pero por ahí alguien dijo que mi obra se refería al circo que arman los políticos. Esa es otra lectura, igual de válida que mi propuesta original”, declaró Avignon.
Otra de las imágenes que supuestamente levantó roncha fue la de un mono gigante realizada por el el diseñador gráfico Freddy Masís. “Los monos son un referente dentro de mi obra. Es un asunto personal, me gusta mucho dibujar simios, gorilas. Lo que pinté en esta pared es, sencillamente, un mono con traje entero comiéndose un ‘churchill’”, afirmó Masís.
Ante la consulta de si la obra se inspiraba en alguna persona en particular, el artista respondió: “Si alguien me trae una foto de un señor y me dice que se parece al mono, esa es su interpretación, no soy yo el que lo estoy diciendo”.
El presidente de la Asamblea Legislativa, Juan Carlos Mendoza, confirmó que él mismo dio la autorización para pintar el mural colectivo. “En la pared oeste ya había un mural que por falta de mantenimiento estaba en estado deplorable, y en la pared sur había pintas varias. Este proyecto fue una oportunidad de llenar de arte las paredes que dan a la avenida central y al bulevar, con miras a atraer nuevos públicos”, declaró el legislador.
Mendoza dijo que, hasta el momento, ningún congresista le había manifestado disgusto con el mural. “Si las imágenes reflejan alguna crítica social o política, bienvenida sea. Los diputados y diputadas debemos aprender a escuchar todas las expresiones que se hacen sobre nosotros”, opinó.