Ya, de por sí, le iba a seguir por todas partes. Así que, a pesar de la oposición de su equipo, el escritor la invitó a viajar con él.
Así fue como Paulo Coelho conoció a Hilal, una joven violinista con quien compartió vagón en el tren que los llevó por Rusia en el 2006 y cuya experiencia quedó retratada en el más reciente libro del escritor, titulado Aleph.
El libro, ya disponible en librerías costarricenses, relata la gira que llevó a Coelho por Europa, África y Asia. “No hice el viaje para encontrar la respuesta que estaba faltando en mi vida, sino para volver a ser el rey de mi mundo. Al regresar, estoy de nuevo conectado conmigo mismo y con el universo mágico. Es esto lo que hace a la vida interesante: creer en tesoros y milagros”, apuntó Coelho en la carta de presentación de su obra número 25.
En ese momento, el autor brasileño admitió estar pasando por una “crisis de fe”.
“Aleph no es sino el resultado de una desesperada búsqueda sin brújula en mano, luego de atravesar una de las etapas más difíciles de mi vida: pocos momentos se antojan más amargos que aquel en que uno se siente vacío, en donde uno cree que ha llegado al límite. El viaje que propicié en el Transiberiano para librar la batalla más importante de todas, aquella destinada a conquistar mi propio reino, fue muy aleccionadora: logré encontrarme con mis miedos y afrontarlos, pedí perdón y fui redimido”, comentó.
Precisamente, el encuentro con Hilal hizo que el escritor se reencontrara consigo mismo y, a la vez, hallara el Aleph: el punto que contiene todo el universo.
“Esto es Aleph: para mí, una de mis obras más íntimas, uno de los libros que con más cariño guardo en el baúl de mis tesoros, no solo porque quise hacer partícipes a mis lectores del ser humano que está detrás del escritor, mostrarles a ese ser que piensa, anhela, sueña, ama, vive, teme, tiembla y respira para transitar por este camino que constituye nuestro único ahora, sino porque con este, mi Aleph, me di la oportunidad de recomenzar”, reflexionó Coelho.
A la fecha, el escritor tiene más de 130 millones de libros vendidos en más de 160 países y su obra ha sido traducida a 72 idiomas.
Es miembro de la Academia Brasileña de Letras y en el 2006 recibió el primer premio de Libreros Mexicanos Las Pérgolas.