Sufriendo en altamar: Tom Hanks ahora es capitán

El secuestro de un buque estadounidense –ocurrido en 1999, muy cerca de las costas de Somalia– es el tema de Capitán Phillips , filme que pinta con astucia e intensidad un suceso de la vida real

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe
Ver más

Título: CAPITÁN PHILLIPS

EE. UU. 2013

Género: Thriller/ Drama

Director: Paul Greengrass

Elenco: Tom Hanks, Barkhad Abdi, Mahat M. Ali

Duración: 135 minutos

Cines: CCM, Cinépolis, Cinemark y Novacinemas

Web: captainphillipsmovie.com

Las desventuras en el mar parecen sentarle muy bien a Tom Hanks. Trece años después de ser nominado a un Óscar por Náufrago (2000), el actor padece en el océano un suplicio más, una odisea que, según la crítica, bien podría valerle la estatuilla.

En esta ocasión, para Hanks no habrá lamentos en una isla, pero sí otras penas en el mar pues en Capitán Phillips (2013) –drama que se estrena hoy en los cines ticos– la aventura de dirigir un barco mercante se convertirá en pesadilla, gracias a unos temibles bandidos.

Retratando un caso de la vida real, ocurrido en el 2009 , Capitán Phillips relata el secuestro del buque Maersk Alabama, que fue retenido por piratas somalíes en aguas internacionales.

El barco era comandado por el capitán Richard Phillips, a quien Hanks encarna en una actuación “que bien merece premios”, opinó Dan Folin, de la revista Empire .

“Merecen galardones, al igual que su director (Paul Greengrass), por esta fascinante, emocionalmente compleja y enormemente inteligente dramatización de una odisea real”, detalló el crítico.

El escandaloso suceso ocupó un lugar en la historia, pues se trató de la primera embarcación norteamericana raptada en 200 años. Además, el suceso dio a pie a un tenso proceso de negociación entre Estados Unidos y los secuestradores.

Tras irrumpir en el puente de mando, los atacantes tomaron a Phillips como rehén en un bote salvavidas, lo cual desató una sofisticada y muy comentada operación de rescate.

Franca y realista. Capitán Phillips , cuyo guion es de Billy Ray, presenta hechos muy cercanos a la realidad, ya que está basado en el libro autobiográfico de Richard Phillips, A Captain's Duty ( El deber de un capitán , 2010).

Greengrass, de tradición documentalista, narra esta historia en formato de thriller , poniendo el foco en la tensión entre Phillips y Muse (Barkhad Abdi), desnutrido y violento expescador, quien es el jefe de la banda somalí.

Según las notas de producción del largometraje , el enfrentamiento entre ellos será duro e irreversible; luego, pasará a desarrollarse “a merced de fuerzas que escapan de su control”.

Greengrass, nominado al Óscar por filmes basados en hechos reales como United 93 y Green Zone , logró la participación de la Marina estadounidense y encerró a los actores en una claustrofóbica réplica del bote salvavidas.

“Era un lugar muy incómodo, olía horrible, el aire estaba viciado, hacía calor y estábamos todos amontonados”, contó Hanks en un reciente encuentro con la prensa en Los Ángeles.

“Paul creó un ambiente muy realista y no podía ser diferente. Hay formas tal vez más agradables, pero como actores, ese pequeño espacio, caluroso y sin ventanas fue una gran ventaja”, agregó.

Hanks se enfrenta a este personaje desde el realismo, la tensión y los primeros planos, elementos que caracterizan el estilo de acción geopolítica de Greengrass. En ese contexto y en un mismo gesto, el actor muestra el agotamiento físico y el espíritu de supervivencia.

“Mi miedo era todo natural”, agregó el ganador del Óscar por las películas Filadelfia (1993) y Forrest Gump (1994).

Fiel a su estilo, Greengrass quiso que los actores no se conocieran antes de filmar la escena en la que los vándalos asaltan al puente de mando. El objetivo era claro: capitalizar el nerviosismo de los cuatro jóvenes de origen somalí al ver a Tom Hanks por primera vez.

“Eso les dio una ventaja a los actores y al equipo, pero también ayudó a Tom, porque no había ninguna clase de intimidad entre ellos. Allí eran antagonistas y esto se nota en la pantalla”, agregó el director.

Al recordar una de las escenas cumbre, Hanks dijo: “Cuando ‘los piratas’ llegaron al barco, había terror verdadero en los ojos de todos los hombres que estaban a bordo del buque”.

“Estos chicos, particularmente Barkhad, transmiten algo que supera cualquier artificialidad”, agregó el intérprete.

Según Greengrass en 135 minutos de metraje, el filme dibuja un mundo en conflicto “entre los que tienen riqueza y los que no”.

En sociedad. Capitán Phillips fue filmada en el océano, en un buque mercante verdadero con tripulación real. En la escena del abordaje, los actores efectivamente se trepan al barco en medio del mar, sin efectos especiales.

La Marina puso a disposición de los productores el destructor portamisiles USS Truxtun, la fragata Halyburton y una nave de asalto anfibia, incluyendo un equipo de oficiales especiales de élite conocidos como Navy SEALS.

De hecho, una mujer que interviene en el intenso final de la película es una verdadera enfermera del Halyburton, reclutada in situ por Greengrass. Para muchos, esa fue la cereza en el pastel de una propuesta cinematográfica que busca conquistar al espectador con un asombroso hiperrealismo.

Con todo y polémica, pues un grupo de tripulantes cuestiona la veracidad en la que el filme presenta los hechos, Capitán Phillips llega a los cines ticos coqueteándole al Óscar y un promedio de aprobación de 8,3 (de 10 puntos posibles) en el sitio metacritic.com .

Según el diario españo l El Mundo , la historia de Capitán Phillips “adquiere en manos de Greengrass el toque exacto entre la emoción y lo fiable; una narración sencillamente escalofriante”. Sin duda, por expectativa y calidad, un serio aspirante al Óscar.