Abdicó el rey español y muchos cineastas se frotan las manos. El monarca que propuso Franco, aquel que se atrevió a callar a Hugo Chávez y que, además, se ganó mil odios como cazador de elefantes seguro que causaría sensación en el cine.
¿Habrá una película sobre el rey Juan Carlos I? Todo parece indicar que sí.
No sería el primer monarca cuya vida y milagros sea ventilada como carne fresca en el cine, llenando los buches de quienes viven locos por los hombres que se sientan en el trono, por sus conquistas y por sus escándalos. [[BEGIN:INLINEREF LNCGNF20140617_0001]] Vea los reyes más icónicos del cine. [[END:INLINEREF]]
Precisamente, hace 81 años, el cine olfateó el seductor aroma de la Corona y se lanzó a la aventura con una de las primeras películas centradas en la figura de un rey: se trató de La vida privada de Enrique VIII (1933), de Alexander Korda, al retratar un famoso pasaje de la monarquía británica.
El polémico Enrique VIII, quien se casó seis veces y rompió relaciones con la Iglesia católica de por vida, fue caldo de cultivo para un filme que llegó a reafirmar una teoría: el cine podía sacarle el jugo a la Corona.
“Los países que tienen reyes consumen muchísimo de este cine. Es que es su historia, es lógico”, opina el crítico de cine de La Nación , William Venegas.
Para el crítico Erick Fallas, lo emblemática de la figura del rey es lo lleva a la gente a las butacas... Bueno, eso y quizá un poquitín de morbo.
Erick Fallas
1.) ENRIQUE V (1989)
2.)IVAN EL TERRIBLE (1958)
3.) EL REY Y YO (1956)
4.) LA LOCURA DEL REY JORGE (1994)
5.) EL LEÓN EN INVIERNO (1968)
William Venegas
1.) BECKET (1989)
2.) MACBETH (1971)
3.) TRONO DE SANGRE (1957)
4.) LA LOCURA DEL REY JORGE (1994)
5.) RAN (1985),
Yoshua Oviedo
1.) El LEÓN EN INVIERNO (1968)
2.) BECKET (1964)
3.) ALEXANDER NEVSKY (1938)
4.) RICARDO III (1955)
5.) EL REY Y YO (1956)
“En la actualidad, la gente se inclina más por la historia detrás de cada uno de los personajes reales, pero dependiendo del personaje puede que haya ángulos polémicos que explotar, como podría ser con el rey Juan Carlos”, opinó Fallas.
El año de su estreno La vida privada de Enrique VIII, incluso ganó el Óscar por la actuación estelar de Charles Laughton. En la alborada del cine centrado en reyes, la cinta de Korda causó sensación.
Acompañada de un prestigio real cada vez más patente, grandes figuras tuvieron el privilegio de ponerse la corona en el cine. En 1964, el director Peter Glenville fichó a Peter O'Toole (Lawrence de Arabia) para filmar Becket, una de las cintas sobre reyes más famosas de la historia.
La película narra los encontronazos entre Enrique II (O'Toole), y Thomas Becket (Richard Burton), canciller y después arzobispo de Canterbury. Sus tradicionales excesos y las afrentas que el monarca realiza contra a la Iglesia oficial de la corona, son el meollo que muestra la cinta.
Becket ganó el Óscar a mejor guion adaptado (1964), ganó el Globo de Oro a mejor película y le dio el mismo honor a O'Toole como actor.
Un dato curioso es que O’Toole volvió a encarnar al mismo rey en El león en invierno (1968). Esta cinta tiene otra cosa muy especial; el actor Anthony Hopkins, como hijo del rey, debutó en la gran pantalla.
El león en invierno obtuvo siete nominaciones al Óscar y ganó tres de ellos. Katharine Hepburn, como esposa del rey, se bañó de oro en esa ocasión.
Bases y contextos. Como es notorio, las relaciones entre la Corona y la Iglesia son un tema recurrente en el cine sobre reyes. Sobre todo, son nexos muy significativos gracias al contexto histórico.
“En la Edad Media, el papado era un reinado y la iglesia de Inglaterra, posteriormente, tenía mucho poder. Por ende, los conflictos no eran religiosos, sino políticos. La religiosidad tenía tanto poder que ponía y quitaba reyes”, explicó Venegas.
Otra característica de algunas de estas películas sobre reyes es que muchas de ellas están basadas en textos dramáticos. Por ejemplo, Becket es una versión de Becket ou l'Honneur de Dieu (1959), de Jean Anouilh.
Otro famoso caso es el de William Shakespeare, cuyos famosos textos sobre la realeza les sirvieron de material a los cineastas. De esta forma, la premiada película Enrique V (1989) llegó a la gran pantalla con aspectos históricos y ficción.
“Pienso que la persona que mejor aprovechó los personajes de reyes, y en general de la realeza, fue Shakespeare. Con gran tino, llevó a la ficción personajes reales y eso trascendió”, dijo Fallas.
El actor Kenneth Branagh dirigió y dio vida a Enrique V, joven monarca influido fuertemente por el clero. El rey es empujado a que invada Francia, mientras sus tropas disminuyen y su carácter se debilita víctima de la inexperiencia.
Al final, Enrique V ganó el Óscar a mejor vestuario, y Branagh alcanzó nominaciones en las ramas de actor y director.
A los retratos de Shakespeare que llegaron al cine hay que sumarle el de Macbeth (1971), de Roman Polanski. En la trágica historia del rey de los escoceses pinta muy bien Jon Finch en el papel estelar.
Retratos vivos. Así como la traicionera costumbre de tener muchas mujeres, los estados mentales de los reyes, su irascibilidad y sus problemas físicos, son temas recurrentes en algunas de las mejores obras de la realeza.
La locura del rey Jorge (1994), por ejemplo, narra la historia de Jorge III (Nigel Hawthorne) y el deterioro en la relación con su hijo, el príncipe de Gales. Este largometraje es también una adaptación del teatro a la gran pantalla.
“Es claro, que este rey no destacó por sus dotes de conquistador o héroe. Él ya no puede razonar y esto es aprovechado por diferentes sectores”, comentó Fallas.
Además, La locura del rey Jorge es uno de los filmes más premiados entre los largometrajes que privilegian la figura de un rey. La película obtuvo el Óscar a la mejor dirección artística y obtuvo nominaciones al mejor actor (Hawthorne), mejor actriz de reparto (Helen Mirren) y guion adaptado.
Iván el terrible (1958), por otra parte, describe los desmanes y las conspiraciones de la monarquía rusa del siglo XVI y pone en evidencia la dureza inmisericorde del zar Iván IV, protagonizado por el actor Nikolái Cherkásov.
Por último, El discurso del rey (2010) –filme más actual centrado en la figura de un monarca– nos muestra la faceta más humana de los monarcas. Colin Firth, en la piel del tartamudo Jorge VI, describe la fragilidad de un soberano y su lucha por superar su incapacidad.
Otros lares. Aunque es claro que la mayoría de películas están basadas en la monarquía británica, existen otras cintas que se salen del canasto. Citamos dos casos.
Un éxito sin precedentes fue el musical El rey y yo (1956), de Walter Lang, sobre el rey Mongkut del desaparecido reino de Siam. Ganó cinco premios Óscar.
También causó sensación El último emperador (1987), de Bernardo Bertolucci. En la cinta, nueve veces premiada por el Óscar, un niño de tres años es coronado emperador de China.
La lista de filmes es larga y basta para complacer los gustos más variados. Mientras espera que la vida del rey Juan Carlos llegue al cine –tal como lo rumoran medios españoles–, no coma ansias, aquí le ofrecemos opciones para que pueda darse un rico manjar de reyes.
Tráilers de algunas de las películas más recordadas sobre reyes:
LA VIDA PRIVADA DE ENRIQUE VIII (1933).
El REY Y YO (1956)
BECKET (1964)
MACBETH (1971)
ENRIQUE V (1989)
LA LOCURA DEL REY JORGE (1944)
EL DISCURSO DEL REY (2010)