El cuento mexicano El emigrante , que según el diario El Universal de México es el más corto en castellano, cruzó las fronteras de un libro para inspirar en Costa Rica un nuevo cortometraje.
“¿Olvida usted algo? –¡Ojalá!”. Aunque usted no lo crea, este es el texto del particular cuento del escritor mexicano Luis Felipe G. Lomelí. Y el cineasta tico Mario Cardona adaptó este escrito para una producción audiovisual que se filma actualmente en San José.
La trama del corto, que se titula igual que el cuento, describe la historia de Omar, quien llega a la capital huyendo de una situación que lo tiene atrapado en sus garras.
“Aún no ha podido hablar con su familia, a la que abandonó. En medio de su desesperación, Omar conoce a Julia, niña que lo acompañará cuando se revele la verdadera dimensión de su tragedia ”, agrega la sinopsis del drama.
La pieza audiovisual, que tendrá una duración de 12 minutos y que se filma en el bar Bbdero, es protagonizado por William Conejo (Omar), Paulette Sánchez (Julia) y Mimi Johnson (Flora).
Los tres personajes muestran en el guion síntomas de depresión social, pues Omar estuvo involucrado en el tráfico de drogas, Flora es una prostituta y la pequeña Julia trabaja en las calles.
“El corto representa la realidad, donde todos somos una dualidad; es decir que el hombre puede ser bueno o malo. Omar, por ejemplo; hace algo malo por necesidad, pero en el fondo él es bueno”, explicó William Conejo.
Expectativas. Para Cardona, el cortometraje es un reto personal que espera estrenar en los primeros meses del 2013, llevarlo a festivales internacionales, pero, sobre todo, que se convierta en objeto de reflexión social.
“Primeramente, fue un reto técnico desarrollar una historia basada en un texto tan breve. Luego, lo fuimos explorando, fuimos encontrando más posibilidades de desarrollo”, dijo Cardona.
“El trabajo es sobre un ser humano que ha dado pasos en falso. Cuando dice ‘ojalá’, como en el cuento, es aquel que confronta su propia historia y olvida cosas que le han sucedido”, agrega el cineasta.
El cortometraje es filmado con una cámara digital HD Arriflex Alexa, similar a la que se usó para rodar la película La invención de Hugo (2011), de Martin Scorsese.