LAS VEGAS. AP. Hace cuatro años Bradley Cooper se había ganado una reputación como un sólido actor de reparto. Ed Helms era famoso por su papel del dulce, pero bufonesco Andy en The Office y pocos, fuera de los círculos de comedia o sus familiares, podían pronunciar el apellido de Zach Galifianakis.
Todo cambió cuando llegó The hangover ( ¿Qué pasó ayer? ), la película de clasificación R (para mayores de 17 años) con mayores ingresos en la historia del cine en Estados Unidos.
La segunda parte, lanzada en el 2011, logró recaudar más de $500 millones en el mundo. Fue considerada por el director de los filmes, Todd Phillips, como mejor que la cinta original.
La próxima semana se estrena en Estados Unidos la tercera y, al parecer, última parte de la serie sobre un grupo de amigos cuyos viajes se tornan extremadamente errados y alocados.
A la gente todavía le cuesta trabajo pronunciar el apellido de Galifianakis, pero la carrera y las vidas de los tres protagonistas cambiaron para siempre por la serie.
“Nunca habría hecho Hangover II si no fuera por Hangover I ”, bromeó Helms en una entrevista reciente, acompañado por sus compañeros de reparto.
“ El efecto que ha tenido en mi vida, desde el punto de vista profesional, es fuera de lo imaginado. He hecho algunas cosas realmente maravillosas, geniales y divertidas que nunca hubiese podido hacer”, agregó el actor.
Entre ellas, se incluyen las aclamadas comedias de bajo presupuesto, Cedar rapids y Jeff who lives at home , ambas del 2011 .
Antes de The hangover , Galifianakis se ganaba la vida con monólogos de comedia, como su propio especial en Comedy Central Presents. Pero ese éxito era mínimo frente a lo que vendría después. “Bueno, tú sabes, en lo financiero”, dijo Galifianakis.
“Fue maravilloso poder comprarle (a mi mamá) un juego de saleros”, dijo acerca de su regalo del Día de las Madres.
Ante la broma, Cooper preguntó: “¿Un juego?”.
“¿Para sal y pimienta?”, agregó Helms.
“Por años solo tuvo sal y nada más un salero”, les contestó Galifianakis.
“Ni siquiera el salero”, prosiguió Cooper, “sólo la sal en una bolsa Ziploc”.
“Así que ahora puedo comprar un juego” , dijo Galifianakis entre risas. “Así ha cambiado mi vida”.
Una cara conocida. Cooper ya iba en ascenso antes de The hangover , tras haber actuado en varias series de televisión. Su rostro apareció en cinco temporadas de Alias y su papel protagónico en la breve Kitchen confidential , de la cadena Fox.
Asimismo, actuó junto a Julia Roberts y Paul Rudd en Broadway en Three days of rain (2005) y dejó una gran impresión como el novio impulsivo de la dama de honor en la película Wedding Crashers (2005).
Después tuvo papeles en Yes man , de Jim Carrey (2008), y en la comedia romántica He's just not that into you (2009).
De hecho, Cooper ya acumulaba tal fama, que fue invitado a presentar el show Saturday Night Live unos cuatro meses antes de estrenarse la primera película de la serie The hangover .
Sin embargo, Cooper asegura que estas películas cambiaron, sin dudas, el rumbo de su carrera.
“La verdad es que The hangover tuvo un impacto más o menos igual en todos”, dijo, sobre el hecho de que el estudio Relativity Media le diera el papel protagónico Limitless (2011), su primer drama en cine, junto a Robert De Niro.
“Si no hubiera sido parte de una película lucrativa, no habría sucedido, de ninguna manera” , explicó Cooper.
“Tras el éxito de Hangover II , creo que no podría haber tenido el dinero para hacer cuatro películas que no pagaban mucho”, entre ellas Silver linings playbook , por la cual fue nominado a un Óscar como mejor actor.
Según comentó Cooper, los filmes de The hangover permitieron a todos los protagonistas aprender algo más sobre sí mismos.
“ Todos crecimos mucho. Primero con la película y lo que pasó después con la misma, salir (a promocionarla) por todo el mundo. Nunca había hecho eso... Ha sido un aprendizaje en múltiples aspectos”, concluyó el actor .