La muerte la tiene contra ellos

Algunos actores son verdaderos expertos en el arte de morir en la pantalla grande. Robert De Niro, Johnny Depp y Brad Pitt figuran entre los actores que en más ocasiones han tenido que marcharse al otro mundo antes del final feliz

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En Hollywood, no cualquiera se hace el muertito. El escalafón de los actores que más veces han fallecido en la pantalla grande está lleno de nombres memorables en la historia del sétimo arte.

Robert De Niro, Al Pacino, Johnny Depp y Brad Pitt son solo algunos de esos reconocidos intérpretes a quienes en más de una ocasión les ha tocado meterse en la piel de un personaje que se marchará al otro mundo antes de que aparezcan los créditos.

Sus muertes incluyen suicidios, linchamientos, emboscadas, asesinatos a sangre fría y accidentes tan insólitos como sin gracia.

Pero no todo son malas noticias, aunque tuvieron que renunciar al final feliz, sus actuaciones y hasta la forma en la que murieron han sido premiadas, valiéndoles el reconocimiento de la crítica y un lugar en la memoria de los cinéfilos.

De acuerdo con el escalafón elaborado por el sitio web www.chacha.com , Robert De Niro, de 68 años, es el actor que más veces ha fallecido en las producciones de la meca del cine, con 15 muertes en la pantalla grande.

Nacido en Nueva York el 17 de agosto de 1943 y considerado una de las figuras más sobresalientes en Hollywood, De Niro “debió morir” por primera vez en 1970, en la película Mamá sangrienta (Bloody Mama) y, a partir de esa fecha, ha sido destinado a fenecer de diferentes maneras: ahogado en Cabo de miedo (1991), acribillado en Fuego contra Fuego (1995) y víctima de una enfermedad terminal en Muerte de un jugador (1973).

Su muerte más reciente le llegó en el filme Machete (2010), donde da vida a un senador corrupto y ambicioso que termina siendo una rayita más en la lista de víctimas del sobrearmado protagonista.

Último suspiro. En la parte alta de la lista de esos actores, que parecen tener más vidas que un gato, aparece el veterano Bruce Willis, con 11 fallecimientos de ficción.

Su primera muerte fue en Pensamientos mortales (1991) y la más fresquita hace solo cinco años, en Planet Terror.

Célebre por sus papeles protagónicos en películas de acción, Willis sabe lo que es morir en el espacio como un héroe (Armageddon, 1998) o ajusticiado como el más bajo de los criminales (Chacal, 1997).

Con igual número de muertes que Willis, aparece el rubio Brad Pitt –que no por guapo se escapa de La Parca–, aunque sus formas de despedirse de este mundo son de lo más variado que ha mostrado la pantalla grande.

Desde el hijo casi inmortal de Zeus, al que matan con un flechazo en el talón (Troya, 2004), hasta el hombre que nació anciano y murió cuando otros dan su primer suspiro (El curioso caso de Benjamin Button, 2008).

La cuarta y quinta casillas del listado la ocupan Johnny Depp y Denzel Washington, quienes para ser dos de los mejores pagados de Hollywood tuvieron que pasar por la pena de “renacer” al menos una decena de veces.

Unas posiciones abajo aparecen Jack Nicholson, Al Pacino y Dustin Hoffman. Este trío de grandes carga con nueve muertes cada uno, entre el villano de historieta que cae de un helicóptero (Nicholson en Batman), el anciano mafioso víctima de un infarto (Pacino, en El Padrino III) y el mágico tendero que se marcha entre las estrellas (Hoffman en Mr. Magorium).

Christian Bale (8 muertes) y George Clooney, Robert Downey Jr., Gary Oldman y Sean Bean (5), cierran el top ten de actores famosos, pero mortales.

Datos curiosos. El veterano Jack Nicholson es realmente un especialista en muertes inusuales o bastante violentas: ya sea acribillado a tiros, despeñado desde gran altura o aplastado por un mapamundi gigante.

Ahora bien, si de muertes sangrientas se trata, muy pocas pueden competir con la que padeció el joven Johnny Depp a manos de Freddy Krueger en el filme Pesadilla en la calle Elm. Algunos, como Christian Bale en El truco final, hasta se dan el lujo de morir varias veces en un mismo filme.

Si hablamos de lujos, ninguno como Brad Pitt, cuyos personajes en Cool world y Meet Joe Black fallecen en escena, pero regresan de la muerte convertidos en un ser animado o en la mismísima huesuda, respectivamente.

Aunque si de muertes se trata, Hollywood también permite revanchas. Por ejemplo, Robert De Niro fue asesinado por Al Pacino en Heat, pero unos años después, hubo revancha: Pacino pereció a manos de De Niro en el filme titulado Asesinato justo.

En Pensamientos mortales y en Los Ángeles de Charlie, el personaje que interpreta el actor Bruce Willis fue asesinado por su exesposa en la vida real, Demi Moore.

Entre las muertes insólitas, figura la de Dustin Hoffman en Hook, donde muere a causa de un cocodrilo... ¡disecado!

Algunas tienden a confundir al espectador, como las muertes de Al Pacino en Atrapado por su pasado e Insomnio, donde es liquidado por John Leguizamo y Robin Williams, respectivamente, dos rostros que los cinéfilos están acostumbrados a ver en papeles cómicos.

Aquí, reaparece Brad Pitt, con las muertes de los personajes que interpreta en Cool World y El club de la lucha, que si bien es cierto fallecen con todas las de la ley en el filme, son seres imaginarios... Sin embargo, en Hollywood todo se vale, hasta vencer a la muerte.