La actriz Alfre Woodard salvó un atropellado estreno

Problemas Un fallo técnico retrasó la proyección de Crooklyn , pero el carisma de la actriz estadounidense hizo amena la espera

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

El carisma y la sencillez de la actriz estadounidense Alfre Woodard pudieron más que una serie de eventos desafortunados que amenazó con estropear la gran noche de inauguración del XV Festival Flores de la Diáspora Africana.

Todo estaba listo para que ayer, en el Cine Magaly, comenzara la proyección del filme Crooklyn , que protagoniza la actriz; las luces se apagaron, las palomitas abundaban en la sala y comenzaron a proyectarse las primeras imágenes del filme.

El problema fue que carecía de sonido. Eran las 8:05 p. m., algo no andaba bien y todo el cine era testigo. Las luces se encendieron, algunas personas abandonaron la sala; otros, pacientemente, esperaron o fueron por algo extra para comer y beber.

Media hora después, Woodard tomó el toro por los cuernos, bajó de su palco y se subió al escenario.

“Íbamos a tener una conversación después de la película, pero tengámosla ahora”, comentó la actriz con una enorme sonrisa y mostrando que, con ella, las poses de diva no tienen espacio.

Charla. Alguien del público le preguntó cómo decide los papeles que va a interpretar. Ella explicó que siempre lee el guion, y se preocupa más porque sea una película de la que no se arrepienta después, antes que del dinero.

Un par de preguntas extra llegaron y, finalmente, a las 8:45 p. m. el sonido apareció.

Tras un aplauso de agradecimiento para la invitada especial, el público logró ver la película de Spike Lee.

La gran gala del festival comenzó un par de horas antes. Desde las 6 p. m., el vestíbulo del cine Magaly comenzó a llenarse de invitados, varios de ellos afrocostarricenses quienes mostraron que saben muy bien cómo vestir para las ocasiones especiales.

El momento cumbre fue cuando apareció la invitada especial de la noche. El destello de las cámaras iluminó por varios minutos a la simpática actriz.

Lo primero que hizo fue saludar a la niña Serghianny Flores Mooke, de 5 años.

Ella vestía un exótico atuendo del diseñador Mario Chacón.

Y desde luego, todos querían una foto con ella. Fue en ese momento cuando la entrada al cine vivió un embotellamiento que nada tenía que envidiarle a la radial en el sector de La Uruca.

Además de simpática, Woodard demostró que es paciente. Uno a uno saludó a los invitados especiales, cruzó unas breves palabras y posó para la foto, todo sin dejar de sonreír.

Una vez que todos ocuparon sus lugares en las butacas llegaron palabras de agradecimiento y el grupo Master Key también tuvo oportunidad de cantar parte de su trabajo vocal.

A la hora del cierre de este diario, los organizadores decidieron continuar con la proyección de la cinta, aunque por unos minutos debatieron si suspenderla.