Ilusiones animadas con sello peruano llegan al cine tico

Cuatro chicos deberán emprender un viaje por la imaginación de un escritor francés para revertir los efectos de un fallido experimento. En medio de su odisea, vivirán las más peculiares y divertidas experiencias

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Una aventura con poca ciencia y mucha ficción, así se define Los ilusionautas , la primera película peruana en 3D. Desde este fin de semana, este filme promete divertir a los más chicos en las salas de cine costarricenses.

El filme animado, de 115 minutos, cuenta las aventuras de Aristóteles, Nicole, Petit Pan, Profiterol y su mascota Houston, pandilla de niños que serán convocados por el presidente de Francia para arreglar un desastre literario provocado por un experimento fallido.

Por error, el escritor de ciencia ficción francés Jean Visogneaux comenzó a mezclar la ficción con la realidad y alguien debe solucionarlo.

Con este fin, deberán infiltrarse a en la imaginación del escritor y vivirán grandes aventuras en cada uno de sus destinos.

Cada integrante del cuarteto posee una característica de Visogneaux: el fuerte de Aristóteles es la tecnología, Nicole representa la acción, Petit Pan conoce al pie de la letra toda producción literaria del escritor, y Profiterol... bueno, él tiene el problema de gases intestinales que sufre el francés.

Los chicos, enfundados en ajustados trajes negros (parecidos a los de la película Thron: Legacy , de los estudios de Disney), pueden cambiar de vestuario para cada situación.

La historia nació en la mente de su director Eduardo Schuldt, cuando tenía 14 años. Desde entonces, le dio forma y color en su propia imaginación hasta ver plasmada su gran obra en la pantalla grande.

Un hito. Los ilusionautas marcó una revolución del sétimo arte peruano, que entró al siglo XXI viendo apenas de reojo el mercado del 3D.

“Hace algunos años, habría sido imposible pensar que veríamos una producción animada de calidad de exportación en 3D. Pero hoy esta industria ha crecido tanto, que el Perú se ha convertido en el país número uno en animación generada por computadora en Latinoamérica”, detalló el diario peruano El Comercio .

Para Schuldt, la animación moderna posibilita generar sensaciones en la audiencia que no son posibles con los efectos 2D. “Nos permite ver la profundidad en el cine. Si quieres hacer sentir que un personaje está libre y muy contento haces una profundidad grande. Si quieres hacer que se sienta claustrofóbico, puedes hacer algo pequeño. Además están los típicos elementos que parecen salirse y que encantan a los niños. Es una nueva herramienta; la base es exactamente la misma, pero tienes nuevos elementos para contar la historia”, dijo a El Comercio .

Producir este filme requirió dos años de trabajo, con 80 artistas digitales involucrados. Su presupuesto se aproximó a los $3 millones.

Los ilusionautas presenta un gran nivel de detalle en sus artes. Según el periódico La República de Perú, si una sola persona hubiera realizado las animaciones, terminar la cinta le hubiera tomado 120 años.

“(La película) es pionera a nivel nacional en dar a sus personajes un cabello elaborado hebra por hebra, digitalmente. Como muestra, le contaremos que el perro Houston tiene más de 20 millones de pelos, cuyo relieve varía de acuerdo a los movimientos musculares del can”, agrega la información.