Papá y exvillano, ese es ahora el famoso Gru, quien luego de abandonar sus fechorías y dedicar su vida a un trío de bellas niñas, la vida le propone un nuevo destino: el de justiciero.
Una taquilla de $540 millones, que en el 2010 ubicó a de Mi villano favorito como la décima animación más importante en la historia de EE. UU., motivó la segunda parte de esta conmovedora historia, matizada de ternuras familiares, locuras al estilo minions e importantes reivindicaciones personales.
Considerada por Variety como “no tan encantadora y única como la original, pero sí muy cercana a ella”, en Mi villano favorito 2 – filme que se estrena hoy en los cines ticos–, Gru se ha olvidado de su pasado y ahora cuida amoroso a Margo, Edith y Agnes, sus hijas adoptivas.
Todo parece ir de película para él, hasta que una organización ultrasecreta –la Liga de Antivillanos– tocará a la puerta de su recién conformado hogar.
“Para Gru, su principal responsabilidad es su familia. Está tratando de imaginar cómo mantenerla y ha comenzado una industria artesanal en su laboratorio. Allí, está tratando de instalar una fábrica de mermeladas y jaleas”, dijo Chris Meledandri, productor del filme.
Sin embargo, el misterioso grupo tiene una importante misión que lo seduce y Gru tomará cartas en el asunto.
“Ahora depende de Gru descubrir quién es responsable de un delito espectacular y llevarlo ante la justicia. Después de todo, se necesita al mejor exvillano del mundo para atrapar al que trata de ocupar su puesto”, dice la sinopsis del filme.
Y aunque existen algunos sospechosos del infame delito, será El Macho quien se lleve las medallas al más bandido de todos. Pero, ¿quién es El Macho? ¿Bajo cuál disfraz se oculta? El propósito es dar con él y detenerlo de una vez.
“Siempre había tenido la curiosidad de participar en una película para niños. El nombre del personaje lo dice todo: El Macho, ya lo van a ver ustedes”, dijo el cantante Alejandro Fernández, quien dobla la voz del malo en la versión latina.
Queda claro que robar la Luna –como pretendía Gru en la primera película–, ya es muy poca cosa para él. Ahora su tema es devolver la paz y dejar un mundo más habitable para él y su familia.
Eso sí, a pesar de que ahora es un hombre bueno, Gru no ha perdido ninguna de sus habilidades. En la batalla, el exvillano de traje negro y espalda ancha no se olvidará del rayo congelante ni de ninguno de sus famosos artilugios.
Amor y minions. En la nueva vida de Gru, el amor es uno de los ingredientes que tiene mayor importancia. Ya no son solo sus hijas, pues se cuela una mujer.
“En verdad, Gru ya poseía ese tipo de sentimientos, pero los potencia con la llegada de Lucy ”, dijo el actor Steve Carell, quien dobla la voz del personaje principal en su versión en inglés.
Lucy es una agente secreta, quien con sus extravagantes aparatos y su forma de pelear, aportará mucho a los objetivos de Gru.
Por su parte, la nueva cinta no olvidará a los minions, esos bichitos que alguna vez ayudaron Gru en sus planes delictivos.
“Los minions nos van a continuar sorprendiendo. Tal como en la primera película, los minions harán gala de una de sus principales cualidades: lo inesperado”, agregó Meledandri.
En la trama, la historia de los minions se mezclará íntimamente con la de Gru, dando a las bichitos amarillos su merecida cuota de protagonismo.
Gru y los minions ya no hacen fechorías en la pantalla grande: entre ellos solo habrá risas, locuras y una floreciente bondad.