Gatúbela: la 'femme fatale' de profundas cicatrices

Enigmática felina. El instinto de supervivencia es la tónica en la flexible moral de Selina Kyle, una mujer peligrosa y filantrópica a la vez

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Camina en lo alto de las azoteas de Ciudad Gótica a través de la delgada línea entre ser una heroína o una villana. El mundo de Gatúbela está plagado de sombras grises; nada es blanco o negro.

Sabe que Batman nunca podrá comprenderla, pero su propia supervivencia y el resguardo de sus seres queridos son el primer lugar en su lista de prioridades.

Poseedora de una figura escultural que le permite enfundarse en un ceñido traje de cuero, Selina Kyle –su nombre real– es también una diosa de la estrategia y de la huida.

“Soy una ladrona y robar es a lo que me dedico, no tanto por el premio, la posesión o incluso las ganancias, sino por el arte de hacerlo, porque puedo, porque soy buena en esto”, aseguró en el cómic Catwoman Vol.2 #38.

Sin embargo, no todo en su vida es gloria. Su madre se suicidó, y el alcoholismo también llevó a su padre a la muerte. Kyle quedó huérfana a los 13 años y así se inició como ladrona para subsistir. Luego fue enviada junto con su hermana Maggie al orfanato para chicas de Seagate, ubicado en uno de los peores barrios de Ciudad Gótica.

Tras descubrir que el administrador de esa organización incurría en malversación de fondos, ese sujeto metió a la adolescente en un saco lleno de piedras y lo lanzó al mar, cual si fuera un gato al que se pretende ahogar. Pero Selina también parece tener siete vidas y logró escapar de la muerte.

En su edad adulta, Kyle se convirtió en dominatriz, cuidadora de gatos y en una dama de compañía que robaba dinero a sus clientes. Mientras tanto, se dedicó a proteger a chicas desvalidas y perfeccionó sus habilidades de combate.

El pasado de Selina la convirtió en una determinada mujer, capaz de afrontar cualquier adversidad. “Mucho tiempo atrás, antes de ponerme esta máscara, todo me atemorizaba”, dijo Gatúbela, en el segundo volumen del cómic #59.

¡Fría, jamás! La Gata surgió con la primera edición del cómic propio de Batman, en 1940. Aunque DC Comics ha publicado diferentes versiones sobre la vida de la pseudofelina, las tensiones sexuales con el Caballero de la Noche permanecen invariables.

Según el argumento de Batman: año uno, de Frank Miller, al conocer a Batman Kyle queda deslumbrada e, inspirada en el traje de Batman, cambia su atuendo violeta original. Pese a que intenta imitar su modus operandi, es en este punto cuando se convierte en ladrona de alto nivel, atraída por las joyas de los hombres más ricos y los más corruptos de Gótica .

La filosofía de Kyle se basa en vivir a toda prisa, amar sin reservas y morir joven. El flechazo de Batman caló tan fuerte en ella, que incluso se convierte, por momentos, en su aliada.

“Los flirteos y los complicados sentimientos del uno por el otro constantemente empujan a ambos en direcciones que jamás hubieran imaginado. Sin embargo, la posibilidad de que un día Gatúbela lleve sus crímenes tan lejos, podrían hacer que Batman no tenga más opción que enviarla tras las rejas”, apunta DC en su sitio web .