La ilusión de volver a suspirar por el amor de Bella Swan y Edward Cullen hizo que fanáticas como Carla Fonseca, Marianela Gamboa y Karla Vargas hicieran fila por seis horas, con tal de presenciar el estreno de Amanecer, la cuarta entrega de la saga de Crepúsculo.
Estas amigas, que han leído todos los libros y han visto todas las películas de la saga, comparten un vínculo muy especial: las tres son sordas.
Pese a esto, cuando se trata de hablar de su adorado Edward, ellas no se reservan una sola palabra.
“Me gusta el romance de la película, la fidelidad y la confianza que hay entre la pareja”, dijo Fonseca.
Como ellas, cientos de personas ilusionadas dijeron presente, al estreno en la sala de Cinépolis, en Terramall.
La fila, que se extendía hasta afuera del centro comercial, estaba compuesta por familias y grupos de amigos.
A las 12: 01 a. m., cuando las luces se apagaron en la sala dos del complejo de cines, el público no se contuvo y aplaudió y gritó como si los protagonistas del filme estuvieran ahí.
Durante dos horas, los asistentes suspiraron con las imágenes que han hecho de esta película un éxito juvenil en todo el mundo, como, por ejemplo, el torso desnudo de Jacob (Taylor Lautner) y la moribunda apariencia de Edward (Robert Pattinson).
Terminado el filme, nuevamente, los espectadores no se contuvieron y volvieron a aplaudir, como si estuvieran en un teatro.
Réplica. La fiebre por Amanecer no fue exclusiva en el Terramall.
En un recorrido hecho por Viva el Tiempo Libre, se constató que en menor cantidad, los fans también dijeron presente en los cines del Mall San Pedro y Multiplaza del Este.
Dos ejemplos de ello fueron la familia Leal, que llegó con siete de sus integrantes para ser los primeros en las salas del Circuito de Cines Magaly y las amigas Melanie Bonilla y Juliana Manrique, quienes aguardaron seis horas para entrar a Cinemark.
Al salir del cine en San Pedro, Josseling Arancibia de 12 años y vecina de Guápiles dijo: “Esta película fue muy chiva. ¡Ay Edward es demasiado guapo!”.