Si es con Paul Greengrass sí, sino, pues no.
Matt Damon se mantuvo firme en su amenaza y, finalmente, logró su cometido. Si Universal Pictures lo quería de vuelta como Jason Bourne –el conflictuado agente de la CIA– la poderosa productora tendría que echarse la mano al bolsillo y llamar a Greengrass sin miramientos.
“Solo volveré con Paul. No lo haré con nadie más. No hay razón para seguir adelante, a no ser que haya una continuación realmente buena”, afirmó el actor en el 2011, cuando se le propuso protagonizar The Bourne Legacy y no aceptó.
Constatar que sin Damon la exitosa saga definitivamente no carbura –pues The Bourne Legacy alcanzó una tímida taquilla–, hizo que Universal Pictures se replanteara las cosas y cediera ante sus exigencias.
Gracias a eso, desde ayer jueves tenemos Jason Bourne (2016) en los cines ticos, la quinta entrega de la famosa y enigmática serie.
Catorce años después de The Bourne Identity (2002), Damon se vuelve a poner en la piel del agente amnésico y las emocionantes persecuciones que caracterizan a la saga toman aires renovados.
Esta vez, Bourne retorna para luchar en contra de una red informática, la cual utiliza el miedo para apoderarse de todo. La historia –basada en las novelas del escritor estadounidense Robert Ludlum–, ahora comienza en Atenas, en medio de las protestas populares por el rescate económico de Grecia.
Pero como es habitual en la saga, su acción volará por ciudades como Berlín, Londres, Beirut, Washington, Reikiavik o Las Vegas. Todos esos escenarios, sin excepción, viven momentos especialmente convulsos.
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“En medio de un mundo azotado por la crisis económica y el colapso financiero, varias organizaciones secretas luchan por el poder”, dice la sinopsis de la película.
En ese contexto, “Jason Bourne vuelve a surgir de forma inesperada. Desde un lugar oscuro y torturado, Bourne reanudará la búsqueda de respuestas sobre su pasado”, agrega el argumento.
¿Será que finalmente lo recuerda todo? Al menos eso dice Bourne en el tráiler de la película, pero no sabemos qué puede implicar ese descubrimiento.
Al lado de Damon, en Jason Bourne regresa a la acción Julia Stiles, como la agente Nicky Parsons, quien apareció en las tres primeras entregas.
Sin embargo, esta vez el principal rol femenino recae en Alicia Vikander, quien tras ganar un Óscar por The Danish Girl , le han llegado una buena cantidad de trabajos para explotar su talento. Por si fuera poco, el elenco lo completan actores consagrados como Vincent Cassel y Tommy Lee Jones.
Jason Bourne se estrenó el 29 de julio en Estados Unidos y aunque desde entonces se ha topado con una crítica mayormente favorable, a nivel de taquilla sus resultados son flojos: en todo el mundo ha recaudado $199 millones.