Adam Sandler y Drew Barrymore viven unas peculiares vacaciones

La nueva comedia se estrenó ayer en cines nacionales. En Estados Unidos recibió malas críticas

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe
Ver más

Adam Sandler y Drew Barrymore son testigos de que nadie conoce las vueltas del destino en su nueva película Luna de miel en familia.

En la cinta del director Frank Coraci, sus personajes, una pareja de padres solteros, deciden que no quieren volver a cruzar sus caminos. Después de una desastrosa cita a ciegas, es lo único en lo que pueden estar de acuerdo.

Sin saberlo, se inscriben por separado en unas vacaciones familiares para despejarse del trajín citadino junto a los hijos de cada uno, y acaban compartiendo una suite en un lujoso centro turístico de safari en África durante una semana, detallan las notas de producción.

El filme, que se estrenó ayer en los cines nacionales, cuenta con la participación del presentador de deportes Dan Patrick (un rostro conocido de SportsCenter en inglés), quien actúa como el jefe de Sandler. Uno de sus compañeros de trabajo es el exbasquetbolista Shaquille O’Neal.

Con las críticas en contra. Esta es la tercera película en la que Sandler y Barrymore actúan juntos, pues ya habían aparecido en la pantalla grande en Como si fuera la primera vez (2004) y El chico ideal (1998). Tal parece que en esta ocasión tuvieron poco éxito, pues esta comedia romántica de Warner Bros. Pictures tiene una calificación promedio de 31, en el sitio Metacritic .

La peor nota, un cero, se la otorgó The New York Times , pues el crítico A. O. Scott repudió “sus políticas de género retrógradas; su deleite en la humillación de los niños; su hipocresía sentimental sobre el comportamiento masculino; su representación cuasi zoológica de africanos como serviles simplones que bailan y tocan tambores”.