Se le vio acostado en el asfalto de la avenida segunda, ajustando su cámara para lograr el mejor encuadre y enfoque, o corriendo por todos lados detrás de bandas, comparsas y carrozas... El público se preguntaba por qué este fotógrafo se esmeraba a tal grado en la cobertura del carnaval de San José.
Y es que para el suizo Stephan Rossi era una gran oportunidad de captar imágenes multicolores para su trabajo sobre las costumbres costarricenses. Está aquí con la tarea particular de hacer ese reportaje para las revistas Du Sura y Geo.
Ayer su cámara logró captar muestras de entusiasmo, alegría y sabor latino, pero para muchos la fiesta josefina se quedó corta en esplendor y colorido. Pese a esto, como ya es tradición, miles de costarricenses colmaron los costados de la avenida segunda y el Paseo de los Estudiantes, ruta que siguió el carnaval.
Siete comparsas, catorce carrozas, doce bandas, dieciocho disfraces individuales, ocho disfraces de grupo, dieciséis personas en zancos y ocho alusiones típicas se juntaron en el desfile. También se vieron veinte carros Mustang y una colección de cuarenta y dos autos antiguos.
Esfuerzo por llevar alegría no faltó, pese a algunas carencias de colorido. Entre lo más destacado, Roy Conejo, de Heredia, trasladó hasta la avenida segunda al murciélago; el grupo de baile de la academia Malecón no cesó de mostrar sus mejores pasos; bailarinas del colegio de Pococí hicieron de las suyas y las comparsas calentaron la fría tarde.
Contagiar al público quizá no era difícil. Ayer quienes llegaron a la avenida segunda y el Paseo de los Estudiantes ya traían la cuota inicial de alegría y, al menos por esa tarde, las alzas de agua, electricidad, teléfonos y leche pasaron al olvido.
En orden
Efectivos de todas las comisarías de la Guardia Civil y de la Policía Municipal mantuvieron el orden, pese a las arremetidas del público por ubicarse en la calle y tener mejor visibilidad.
El coronel Juan Félix Barrantes, director de la fuerza pública, explicó que se hizo un amplio despliegue, pero prefirió -porque nunca se dice- no dar el número de gente utilizada. También participaron la Policía Municipal, con 60 agentes, y la Reserva de la fuerza pública, con 80.
Y en ese ambiente de orden, controlado por la autoridad, transcurrió la presentación de quienes no solo se arriesgaron a presentarse ante el público, sino que también se diputaron ¢6,03 millones en premios. La comparsa ganadora del primer lugar, por ejemplo, se acreditó ¢500.000 y la segunda, ¢350.000.
Al primer lugar de bandas se le otorgó ¢350.000; igual suma al ganador de alusiones típicas y ¢400.000 al primer puesto de carrozas públicas y ¢500.000 al de carrozas populares.
Anoche el jurado para estas y todas las demás categorías se reunió en la sede del Concejo de San José, pero no será hasta hoy cuando dé a conocer los resultados, informó el presidente de la Comisión de Carnaval, regidor Rafael Ramírez.
Creditos: Información elaborada por los redactores Rónald Matute, José Luis Rodríguez y Marvin Barquero. Las fotografías son de Mario Rojas y Mariano Matamoros.