'El Marginal': Drama y realidad tras las rejas

La serie expone, con ficción, la vida de corrupción y delincuencia que se teje a diario desde un penal nada alejado de la realidad.

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Por primera vez la cadena Universal Channel proyectará para la región una serie hecha en Latinoamérica. El Marginal es una ficción policiaca y dramática que refleja la realidad carcelaria no solo de Argentina, sino la que se vive en nuestra sociedad.

La producción narra la historia de Miguel Dimarco, un expolicía que entra al penal San Onofre como infiltrado con la misión de descubrir quiénes son los secuestradores de la hija de un prominente juez del país.

En el reclusorio, Pastor (su nombre de encubierto) vive las más trágicas situaciones debido a que el lugar es comandado internamente por dos bandas: Los Borges y la Sub-21. Los Borges son dos hermanos inseparables, el menor, llamado popularmente Diosito es encarnado por Nicolás Furtado, actor de origen uruguayo.

Este es uno de los personajes más llamativos de la serie tanto por su relevancia en la historia como por su particular forma de ser.

Aunque la serie está disponible en Netflix, Universal la estrenará el 30 de enero, a las 8 p. m. Este programa ha recibido comentarios positivos por parte de la crítica especializada ya que se apega mucho a la realidad de los internos en los reclusorios y a la vida de corrupción y delito que se vive día a día tras las rejas.

Vía telefónica, Furtado realizó una conferencia de prensa con varios medios de comunicación de Latinoamérica para contar cómo logró el desarrollo de Diosito y la importancia de la serie para la producción latina y su posición sobre temas de importancia social.

A continuación un extracto de esa conversación:

¿Qué tanto representa la serie a la realidad y cómo impactó a la opinión pública?

-Hemos sido bastante fieles a pesar de que es una ficción y mucha cosa es inventada. Todo ese mundo, la parte más visual –y en parte la problemática que pasa en la serie– es lo que pasa en la vida real y en la cárcel real. Nuestro desafío es reflejar lo que se vive en lugares así.

¿Cuesta mucho adaptar el personaje que vamos a ver? ¿Cómo se preparó?

-Hice un trabajo de investigación, me presenté así a los casting. Desde el primer momento me traté de poner en la piel de un personaje con estas características, no fue fácil; me llevó un tiempo de análisis de estudio y de investigación. Fue junto con los autores y directores que lo fuimos creando.

¿De qué forma impactó en usted caracterizar a un personaje como Diosito?

-Fue algo nuevo como actor. Nunca me había tocado un personaje ni parecido a este, fue un desafío que marcó un antes y un después. Sabía que estaba la posibilidad de mostrarme como actor, traté de hacer un trabajo muy completo en la construcción de este personaje; me sorprendió la magnitud que tuvo y la cantidad de gente que lo vio.

En este momento hacer una serie policiaca es complicado por la amplia oferta que existe sobre el tema. ¿Qué es lo que tiene El Marginal para conquistar al público y poder darle algo diferente?

-Hay muchas series de cárcel y con temáticas parecidas, pero El Marginal tiene la particularidad de que es bien nuestra, tienen nuestra forma, nuestra idiosincrasia. Es distinta por ser argentina, por contar historias locales; si bien pasan en otros países, la forma en la que se cuentan es propia. Además, tiene muchas otras cosas, no solo es una serie policial, tiene otros géneros dentro como el drama, creo que eso toma un gran peso en esta historia.

¿Cómo fue el proceso de adopción del personaje sobre todo por las características que tiene de que, no solo está en una cárcel, sino que consume drogas?

-Fue un gran desafío. El principal reto fue hacer creíble todo esto, Diosito pasa por situaciones extremas de violencia, de drogas y muchas cosas más que van a poder ver en la temporada. Traté como actor de hacerlo con mucha convicción, que fuera creíble. Tuve que agarrarme de elementos de la vida real, de foros, videos y programas que tratan esas temáticas; hice un recopilado de todo eso, armé el personaje con este tipo de escenas y situaciones que son bastante fuertes y difíciles.

¿Qué tanto se relaciona el personaje con su propia personalidad. Qué descrubió de usted mismo y de la sociedad durante el proceso del proyecto?

-La relación es que el personaje tiene un poco de mí, seguro. Uno como actor trabaja con sus emociones, sentimientos y formas de expresar algo; si bien cambia el contexto, debe de haber mucho de Nico en Diosito y viceversa. Lo que descubrí es que generalmente no se es muy consciente de este mundo, de esta realidad que muchos viven tanto en el tema de los presos como de los guardas. Uno en el día a día no lo vive, no es consciente; eso fue lo que a mí más me modificó: conocer un poco más, estar más alerta, ser más consciente de esta realidad. Considerar la forma de mejorar eso –de alguna forma mostrándolo– es un punto de partida para que puedan cambiarse las malas condiciones que se viven dentro de la cárcel o afuera relacionadas con este tema.

¿Cómo es la energía de trabajar en una locación como la que se da en esta historia?

-La locación nos ayudó mucho. Es una cárcel de verdad abandonada, pero las paredes, los techos, los pisos, los pasillos que recorremos fueron de una cárcel real. Hay una energía que se siente, eso nos ayuda como actores a generar esos climas.

Diosito fue uno de los personajes más aceptados por el público, incluso ya se confirmó que la segunda temporada es una precuela basada en este personaje. ¿Por qué cree que se lo merece?

-Creo que Diosito fue querido por el público por esa forma de manejarse, eso de impulsivo que él tiene. No diferencia bien lo bueno de lo malo, siempre fue fiel a sí mismo, muy leal; siempre tiene una justificación para todo lo que él dice o hace, es como bastante honesto consigo mismo. Todo eso simpatiza en la gente, además, por los pasajes de comedia que tiene ya que El Marginal es una serie que te tiene tenso viéndola y, de repente, Diosito aparece con algo cómico o gracioso para alivianar; eso a la gente le gusta y por eso lo quieren volver a ver.

¿Cómo aborda el personaje sin caer en estereotipos?

-Me agarro mucho del guion, me apoyo en las escenas que vienen escritas. Siempre trato de no caer en lo obvio o en estereotipos buscándole una vuelta más al personaje y a la escena. Lo preparo unos días antes, buscamos que el personaje sorprenda.

Esta es la primera vez que la cadena emite una serie hecha en Latinoamérica, ¿qué significa esto para los artistas y para la producción?

-Es una oportunidad enorme que la serie se transmita en Latinoamérica porque va a llegar a muchos países, muchos hogares que antes no la tenían. Nos van a conocer como actores, además a la producción nacional que es muy buena y cada vez está creciendo más. Todo lo que pasa en América Latina tiene su repercusión en otros continentes, está bueno que empiecen a mirar un poco para acá, nos están viendo y les gusta lo que estamos haciendo.

Véala: Martes 30 de enero, a las 8 p. m., por Universal Channel.