Las universidades públicas costarricenses ya están conectadas de nuevo a una Internet científica, especial para realizar investigaciones y ponerse en contacto con colegas de todo el mundo para trabajar conjuntamente.
Esta especie de Internet dentro de Internet se llama Red Clara y une a países de Latinoamérica con redes similares en todo el mundo.
Según explicó Álvaro de la Osa, representante de esta red en Costa Rica, la conexión actualmente ofrece una velocidad de transmisión de unos 400 mbps, pero tiene la posibilidad de aumentar hasta 2,5 Gbps.
Costa Rica estuvo desconectada de esta red científica desde el 2006 debido a que las instituciones que participaban en ella no lograron un acuerdo sobre el pago de los costos de conexión y suscripción.
Ahora, el Consejo Nacional de Rectores ( Conare ) asumió el pago, que durante un año asciende a cerca de ¢150 millones.
“Esta es una red como Internet, pero físicamente separada. Es como un club que mantiene el objetivo original de Internet, que era el de un intercambio entre académicos”, explicó De la Osa.
De esta manera, los investigadores no tienen que competir con el resto de personas, que normalmente navegan por Internet para revisar su correo, las redes sociales, los sitios de noticias o YouTube.
Sobre la red también funcionarán servicios de telefonía y video sobre Protocolo de Internet.
“Canal 15, de la Universidad de Costa Rica, por ejemplo, podría transmitir su señal por esta vía a otras universidades”, explicó De la Osa.
El funcionario dijo que espera que las universidades ticas puedan desarrollar proyectos, como uno que planean de procesamiento de datos en la nube, los cuales permitirían generar recursos para pagar la conexión.