El próximo smartphone estrella de Xiaomi, el ‘Mi Mix 4’, un nuevo integrante de la familia de dispositivos pionera en ofrecer smartphones con pantallas casi sin marcos, tendrá muy probablemente una cámara con una resolución inusual: 108 megapixeles, la más alta disponible hasta ahora en un teléfono.
El sensor es un ISOCELL fabricado por Samsung y diseñado en colaboración con Xiaomi, y tiene un tamaño también inusual, 1/1,33 pulgadas; es uno de los más grandes a la fecha.
Para quienes vienen siguiendo la evolución de los sensores en las cámaras en los teléfonos, el número viene aparejado a otro concepto muy difundido en los últimos años: el de ‘pixel binning’, que justifica esta resolución usando cuatro elementos del sensor para generar un pixel en la imagen (Samsung lo llama tetracell; cada fabricante tiene un nombre diferente).
Así, este sensor de 109 megapixeles genera fotos de 27 megapixeles, pero al tomar cuatro mediciones para cada pixel su sensibilidad en situaciones de baja luminosidad es mayor a otras alternativas. El nuevo sensor es capaz de grabar video en 6K a 30 cuadros por segundo.
Samsung también anunció en mayo un sensor de 64 megapixeles con la misma técnica (y acá se pueden ver algunas de las fotos que logra); equipos como el Motorola One Vision usan un sensor de 48 megapixeles con ese propósito; Huawei con el P30 Pro implementa una técnica similar, y hay muchísimos modelos más, sobre todo de compañías chinas como Oppo o Vivo.
Un elemento singular es que Samsung ha evitado hasta ahora esta configuración; toda la línea Galaxy S10 y Note10 usa una combinación de procesadores de 12 o 16 megapixeles, lo mismo que Apple y Google, entre otras compañías. La ventaja del sensor de muy alta resolución, no obstante, es que permite simplificar el diseño del equipo y suplir otras carencias, en la lentes o en el cada vez más crucial procesamiento de la imagen por software.