En Costa Rica el Gobierno ejecuta proyectos que incluyen el componente tecnológico, pero en los que los temas digitales no forman parte de una política pública integral, sino que tienen un tratamiento desarticulado.
El Programa de la Sociedad de la Información y el Conocimiento (Prosic), de la Universidad de Costa Rica (UCR), plantea esta crítica en la más reciente edición de su informe anual, el cual fue presentado ayer por la tarde.
Uno de los capítulos del documento estudió las políticas públicas que lleva el Gobierno en el tema de tecnologías de información y comunicación (TIC).
Así analiza distintas iniciativas, como el programa de Gobierno Digital, el Acuerdo Social Digital y los Centros Comunitarios Inteligentes (Cecis) del Ministerio de Ciencia y Tecnología (Micit).
Minimalista. “Como balance general de la consolidación del Gobierno Digital y las políticas públicas sobre las TIC en Costa Rica hasta y durante el 2011 se observa la persistencia de un enfoque minimalista de lo digital. Pese a la presentación de la ASD, aún lo digital se reduce a una cantidad de proyectos aislados y sin interoperabilidad desde el Estado costarricense”, dice el informe.
“A veces respondemos a ciertas demandas que son más visibles en un solo momento. Se responde con una política en minúscula a intereses específicos y se omite la Política con mayúscula con visión de largo plazo”, dijo a La Nación Jorge Monge, director del Prosic.
Según el criterio de los expertos, un liderazgo claro y fuerte ayudaría a cambiar la situación.
“Se constata un débil liderazgo para conducir una visión más integral del Gobierno Digital y las políticas públicas sobre TIC”, se añade, aclarando que la presidenta, Laura Chinchilla, ha dado señales de que le interesa el tema, pero que la débil institucionalidad del país “no le ha permitido ejercer esa visión”.
“El Gobierno Digital se ha reducido a un conjunto de iniciativas dispersas y aisladas que desde el punto de vista de un gobierno digital no genera los impactos que debería tener”, manifiesta.
Esta situación se ve reflejada en que, por ejemplo, el Poder Legislativo “presenta nulos avances en el tema de la digitalización”.
Al mismo tiempo, el Poder Judicial tiene un uso más intensivo, pero el Tribunal Supremo de Elecciones, según expertos consultados por el Prosic, “ha mostrado resistencia a asumir el reto de la firma digital”.
El Prosic insistió en que depender del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) perjudica la labor del Gobierno Digital.
“También se constata que no hay un uso intensivo de lo digital en la sociedad civil organizada, como otro pilar del Estado digital”, señaló el Prosic en su informe.
Propuestas. Jorge Monge explicó que el Prosic ha organizado jornadas de reflexión con distintos actores relacionados con los temas tecnológicos para dar recomendaciones sobre cómo deberían ser esas políticas públicas y las capacidades del Estado necesarias para cumplirlas.
“Algunas de las características es que sea estable, adaptable, que tenga buen modelo de gestión, que sea implementable y que tengamos los recursos, por ejemplo. En este país a veces se le llama política a cualquier ocurrencia”, dijo.