Todo un pueblo despidió a dueño de hotel y dos hijos asesinados

Cuerpos los llevaron directo a nichos; no hubo ceremonia religiosa

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Bolsón de Santa Cruz. Todo un pueblo despidió ayer al empresario hotelero y a sus dos hijos, asesinados el sábado en La Fortuna de San Carlos.

Se trata de la comunidad de Bolsón de Santa Cruz, Guanacaste, que ayer a las 4 p. m. estaba desolada. Todas las casas alrededor de la plaza se hallaban cerradas y no había nadie en las calles.

Tres jóvenes sentadas en la parada de bus explicaron el por qué: “Están en el funeral”.

Precisamente, en el cementerio de Bolsón había cerca de 200 personas y unos 30 carros. Eran familiares y vecinos que, desde las 2 p. m., habían llegado para despedir a Geovanny Soto Ruiz, de 52 años, y a sus hijos Mauricio y Enmanuel Soto Soto, de 29 y 20 años, respectivamente. Los hombres fueron asesinados, el sábado en la madrugada, en La Fortuna de San Carlos, Alajuela.

La familia Soto es propietaria de Mountain Paradise Hotel, ubicado en La Palma de La Fortuna, un hotel creado en el 2007, calificado con tres estrellas y que cuenta con 41 habitaciones.

Bolsón se halla a 30 kilómetros de Santa Cruz. Se trata de gente sencilla, dedicada al ganado y a la siembra de caña de azúcar.

Rápido. El funeral se realizó a las 3:50 p. m., cuando tres carros de la Funeraria del Magisterio llegaron al pequeño cementerio. Los ataúdes, cargados en los hombros de amigos y familiares, fueron llevados hasta el nicho de la familia, donde se sepultaron los cuerpos.

Los familiares más cercanos (hermanos del empresario) no quisieron hablar.

Así, con la vigilancia a distancia de tres oficiales de la Fuerza Pública fuertemente armados, se realizó el funeral. Todo fue muy rápido. A las 4:15 p. m. ya solo quedaban unas 20 personas en el cementerio. Ninguno de los féretros fue abierto.

Por otra parte, al sitio no llegó la esposa y madre de los fallecidos, que se acogió al sistema de protección de víctimas y testigos.

De acuerdo con el OIJ, los tres cuerpos fueron retirados por la familia el lunes a las 6 p. m.

Según Iselda Cascante, una de los asistentes al funeral y de las pocas personas que habló, en esa comunidad están muy dolidos por lo ocurrido, pues recuerdan a Geovanny Soto como “muy cariñoso”.

Agregó que el empresario fue muy amigo de su padre.

Cascante manifestó que esa familia suele llegar a Bolsón a pasear, pues ahí viven los padres del empresario, mientras que los de su esposa son de Ortega, una localidad ubicada a cuatro kilómetros de esta pequeña comunidad.

Casa allanada. Paralelamente, oficiales del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) allanaron la residencia de la familia Soto Soto, situada unos 50 metros al sur del Banco de Costa Rica, en el centro de La Fortuna.

La diligencia se inició a las 6 a. m. y concluyó a las 8:10 a. m., y estuvo a cargo de Flor María Hidalgo, fiscala del Ministerio Público; Maribeth Mora, jueza penal, y una decena de agentes judiciales.

Al salir de la vivienda llevaban consigo varias bolsas con muchos documentos y objetos diversos no especificados.

Además, 12 horas antes había terminado una diligencia similar en el hotel Mountain Paradise.

Las autoridades judiciales secuestraron en las oficinas administrativas discos duros, papeles y libros contables de la empresa.

La información la confirmó Mayid Muñoz, vocero del Hotel, quien afirmó que el establecimiento sigue funcionando normalmente.

Todos los documentos y objetos decomisados están siendo analizados, en busca de información para aclarar el triple crimen.