Pobladores de Grecia perciben emisiones de gases tras desaparición del lago cratérico en volcán Poás

CNE le sigue el pulso de cerca al coloso alajuelense

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El volcán Poás, uno de los más activos del país desde los últimos meses del año 2023, ha perdido el lago cratérico y ahora los gases salen sin obstáculos a la atmósfera. Durante los últimos días, vecinos de diversas comunidades al norte de Grecia han informado sobre el olor a azufre que llega hasta sus comunidades.

La ausencia del lago y el viento en la cima permite que materiales como el azufre y el dióxido de carbono se movilicen fuera de los límites del Parque Nacional.

La Comisión Nacional de Emergencias (CNE) realizó una sesión con el Comité Asesor Técnico de Vulcanología y Sismología, donde se acordó mantener una comunicación estrecha entre instituciones. En los próximos días, los equipos técnicos y científicos continuarán reunidos para decidir si continúan, aumentan o se derogan las medidas preventivas que actualmente existen en el Parque Nacional.

Este lunes se observó una zona de incandescencia en la boca principal, mientras que las emisiones de gases y la concentración de dióxido de azufre (SO2) se mantienen estables con ligeras fluctuaciones. A eso de las 10:45 a. m. se detectó un máximo de 3,2 partes por millón de SO2.

El Poás, cuyo cráter se encuentra a 2.687 metros sobre el nivel del mar en Alajuela, muestra una actividad eruptiva baja. Según Javier Pacheco, vulcanólogo del Observatorio Vulcanológico y Sismológico de Costa Rica (Ovsicori), el número de erupciones que superan los 100 metros de altura ha disminuido, “aunque nunca se puede descartar por completo la posibilidad de una erupción mayor”, expresó.