Un operativo hecho de manera conjunta entre el Ministerio de Salud, la Interpol (Policía Internacional), diversos cuerpos policiales costarricenses y el Colegio de Médicos permitió decomisar 11.273 unidades de medicamentos y productos naturales ilegales.
Se trata de artículos adulterados con la alerta sanitaria, elaborados sin cumplir con las buenas prácticas de manufactura, de contrabando, que carecían de registro sanitario o lo tenían falsificado, vencido o cancelado e incumplían los requisitos de etiquetado.
Esa irregularidades hace que se consideren “de alto riesgo para la salud de la población”.
Según un comunicado de prensa del Ministerio de Salud, entre el 3 y 10 de marzo se intervinieron en total 22 establecimientos, entre los cuales hay laboratorios, macrobióticas, farmacias, consultorios, la aduana postal, el aeropuerto internacional Juan Santamaría y puestos fronterizos.
Por ejemplo, en San José, se ubicó un laboratorio llamado Pelysch S. A., el cual operaba sin ningún tipo de permiso y fabricaba medicamentos sin registro sanitario, incluyendo productos para uso oftálmico.
En Tibás, se incautaron suplementos y medicamentos anabólicos llamados Suplementos Gym, los cuales no contaban con el registro sanitario correspondiente.
Por ese mismo motivo se confiscaron tabletas Sex-Max, Mero Macho y Mega Gold, que también están adulteradas con ingredientes de medicamentos.
Diana Víquez, de la Unidad de Normalización y Control del Ministerio de Salud, destacó que los trabajos son parte del operativo Pangea XIII, coordinado anualmente por Interpol Francia y hecho en diversos países de manera simultánea.
La funcionaria hizo un llamado para que las personas verifiquen los productos antes de comprarlos y, en caso de detectar una irregularidad, hagan la denuncia correspondiente.