Minae intenta salvar a jaguar que mata terneros y caballos

Expertos estudian cómo contener al felino que acabó con otros 10 animales

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Rolando Álvarez es un campesino de La Unión de Guatuso, en Alajuela, que el último mes perdió a dos potrancos tras ser atacados por un jaguar.

Al igual que él, los dueños de ocho terneros que también murieron a causa de este felino, intentan proteger a su ganado para evitar más muertes.

Los poblados donde se registraron los ataques son La Unión, Las Letras, Costa Ana, y Mónico en el cantón de Guatuso, y sectores cercanos a Caño Negro, en Los Chiles, Alajuela.

Pese a que en meses anteriores se habían reportado algunos ataques de uno o más jaguares, desde hace un mes comenzaron a aumentar de forma repentina.

Un día después de haber recibido la primera alerta, funcionarios del Ministerio de Ambiente y Energía (Minae), en San José, se desplazaron a la región para verificar la información de los afectados con las muertes.

Allí se confirmó la versión de los pobladores y se determinó que uno o más jaguares, conocidos en la zona como tigres, están atacando a los animales.

Según las autoridades, el felino mantiene su hábitat en una reserva privada de 710 hectáreas llamada La Garroba, ubicada entre los cantones de Upala, Guatuso y Los Chiles.

Los trabajadores del Minae manifestaron que la reproducción de los felinos, sumado a la pérdida de su fuente primaria de alimentación debido a la cacería ilegal, son las principales causas de los ataques.

Luego de que los cazadores matan a los animales que sirven como alimento a los jaguares en su habitat, los felinos se ven obligados a explorar otro sitios en busca de comida, por lo que llegan hasta los poblados más cercanos.

Recomendaciones. José Quirós, encargado de Vida Silvestre del Minae, hizo varias recomendaciones a los vecinos de las localidades afectadas, con el fin de disminuir el riesgo de los ataques.

Entre las medidas, Quirós mencionó vigilar a los depredadores, mantener a las gallinas, perros, vacas, reses y caballos cerca del corral, así como usar ruidos fuertes para espantar a los felinos.

Además, colocaron cámaras fotográficas, que reaccionan al movimiento, en el área protegida para captar a los felinos que se movilizan en la zona.

Los expertos en vida silvestre piden a la población no matar ni lastimar a los felinos.

Los funcionarios del Minae se reunirán este viernes, a las 2 p. m., con los lugareños para anunciar las medidas por tomar para prevenir nuevos ataques.

Peligro de extinción. El jaguar se encuentra en peligro de extinción, en razón de la pérdida de su hábitat natural por la deforestación y la cacería ilegal.

Estos felinos pueden llegar a pesar hasta 150 kilos. Su longitud varia entre 1,70 y 2,30 metros, y su altura es de unos 85 centímetros.

La agudeza de sus sentidos del olfato y el oído, sus habilidades para correr, trepar árboles, nadar y moverse a ras del suelo tras una presa, lo convierten en un excelente cazador. Los expertos afirman que el jaguar es más activo durante el atardecer y la noche.

Al ser un corredor ágil y rápido, es letal para la mayoría de sus presas tanto en la tierra como en el agua, ya que puede llegar a nadar kilómetros sin detenerse.