Paso Canoas. Un incendio provocado destruyó, la madrugada de este domingo 10 de enero, una bodega del Ministerio de Hacienda en Paso Canoas, en la cual se guardaban cigarrillos, pantallas y licores decomisados por entrar como contrabando.
Los principales indicios de mano criminal que tenían el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) y el Cuerpo de Bomberos eran un corte en la malla perimetral, huellas de calzado en el suelo y una lámina de una pared lateral que fue levantada.
Además, las autoridades determinaron que el fuego se inició cerca del punto por donde habrían ingresado al local de 1.000 m², que quedó destruido.
No obstante, este lunes aún no se había podido confirmar el uso de algún combustible como acelerante, pues la revisión tomará tiempo debido a que el lugar es amplio y había botellas con licor (el cual propaga el fuego) almacenadas por todo el inmueble.
Hacienda desconocía el monto de las pérdidas y, según admitió Fernando Rodríguez Garro, viceministro del área de Ingresos, ni la bodega usada por Aduanas (y propiedad del Estado), ni los bienes decomisados, contaban con seguros contra incendios.
Envuelto en llamas. La alerta sobre el incendio la recibió el Cuerpo de Bomberos el domingo a las 2:50 a. m., cuando el vigilante del lugar, que está en una casetilla a 100 metros de distancia, observó que se quemaba la bodega.
“Cuando llega la primera unidad, el fuego estaba totalmente propagado”, comentó Héctor Chaves León, director de Bomberos, quien agregó que las llamas consumieron toda la mercadería almacenada y causaron daños graves al inmueble.
El OIJ informó de que el sistema de vigilancia con cámaras de seguridad tiene más de un año de estar defectuoso.
Según Rodríguez, luego del robo de un contenedor lleno de cigarrillos del patio de la Aduana de Canoas, en abril del 2014, temieron otros hechos similares, por lo que en julio pasado empezaron a destruir licores y cigarros declarados pero en abandono.
“Estábamos planeando continuar (...) pero el nivel de saturación de la bodega era tal que no se podía caminar por los pasillos (...). La idea era desahogar el local”, relató el viceministro.
Alegó desconocer posibles amenazas para incendiar el lugar con la finalidad de eliminar evidencia de procesos judiciales, pero dijo que en el almacén había mercancía decomisada hace poco que debía ser valorada.
“La valoración es un trabajo pericial que determina el valor de lo decomisado; si no se tiene esa valoración, la Fiscalía no puede presentar la acusación (por contrabando y el caso tiene que desestimarse)”, explicó.