El Ministerio de Justicia destacó este miércoles que en poco menos de tres meses, desde que comenzó la implementación progresiva del bloqueo de la señal celular en centros penitenciarios, el sistema impidió que 3.472 intentos de actividad celular se convirtieran en llamadas o en conexiones a Internet.

Lo anterior con base en el primer corte aportado por las empresas telefónicas a cargo de implementar la solución tecnológica.

El 67% de los intentos se registraron en los centros penitenciarios del Complejo Occidente, en San Rafael de Alajuela, conocido como La Reforma, donde hubo 2.325 intentos inhibidos.

En el Centro de Atención Integral (CAI) San José, conocido como San Sebastián, fueron 243 los intentos inhibidos.

Entre otros de los sitios donde los presos intentaron conectarse ilegalmente estuvieron el CAI Carlos Luis Fallas, en Pococí, con 200 casos; en el CAI Marcus Garvey, Limón, con 176 y en la cárcel de mujeres de San Rafael Arriba de Desamparados, llamada Vilma Curling, con 116 intentos.

Las cifras las dio a conocer la ministra de Justicia y Paz, Fiorella Salazar, quien afirmó que el bloqueo de señal celular es una herramienta más en la lucha contra las estafas.

“Lo importante en todo momento es la toma de conciencia de la ciudadanía para no caer ante los timos. Como es previsible, la mayor actividad celular bloqueada se da en la Gran Área Metropolitana”, dijo Salazar.

Pese a esa reducción, el director del Organismo de Investigación Judicial, Wálter Espinoza, afirmó en su reciente informe de labores que las denuncias por estafas se mantienen con tendencia a la alza y que las pesquisas revelan que de las cárceles salen la mayoría de las llamadas.

“Nosotros hemos establecido, a partir de estudios policiales internos, que desde las cárceles se generan la mayoría de las estafas de carácter telefónico”, dijo Espinoza.

Añadió que ese bloqueo también urge generalizarlo a todos los centros penitenciarios cerrados, porque otros delitos como extorsiones, homicidios, actividades del narco y privaciones de libertad también se ordenan desde esos sitios.

El jefe policial afirmó que hasta el 21 de diciembre los fraudes no han mostrado disminución y todavía se originan desde las cárceles.

Según el Ministerio de Justicia, ya se están bloqueando señales de celulares en 12 de los 21 centros penitenciarios cerrados que tienen en todo el país y la idea es seguir el año entrante con otros.

“Ha sido un año de fuertes retos, pero también de avance. En la nueva normalidad del 2021 queremos consolidar los temas que están en ejecución y retomar con fuerza las actividades educativas, laborales y de prevención”, manifestó Salazar.

Lo destacado en informe ministerial

-Se redujo el hacinamiento de un 30,9% en el 2019, a un 21,4% en el 2020.

-Se crearon 1.696 nuevos espacios carcelarios.

-Se aprobaron 241 traslados a régimen semiinstitucional (abierto) para personas con riesgo por covid-19.

-Los presos afectados por covid-19 al 23 de diciembre son 2.207 y de ellos, 13 fallecidos. La tasa de letalidad es del 0,64%.

-Hay 1.794 personas con tobilleras electrónicas por orden de autoridades judiciales.

-Se decomisaron en cárceles 120 kilos de droga, 1.790 celulares, 4.937 accesorios para teléfonos, 9.368 armas punzocortantes, ¢14,4 millones y 2.094 chips telefónicos.

-Desde mayo del 2018 se registran 4.209 espacios nuevos o habilitados, la meta eran 3.000 en toda la administración.