Alterado por una acalorada discusión con su madre, una mujer adulta mayor, un hombre de unos 55 años, identificado solo como Alejandro, mantuvo retenida ayer durante tres horas a su nueva empleada doméstica, confirmó la Policía.
La emergencia fue reportada a las 5:05 p. m. luego de que varios vecinos del residencial Los Anonos, en Escazú, escucharon cuatro detonaciones en una vivienda.
Juan Carlos Arias, jefe de la Fuerza Pública de San José, explicó que al inicio atendieron el caso como violencia doméstica, pero luego el individuo decidió atrincherarse dentro de la casa.
Al sitio se presentaron negociadores del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), agentes del Servicio Especial de Respuesta Táctica (Sert) y dos unidades de Cruz Roja, ante el riesgo de que alguna persona resultara herida.
El diálogo rindió frutos cerca de las 10 p. m., cuando el sujeto accedió a las peticiones de los oficiales y se entregó sin oponer resistencia.
“Tras conversar con el hombre accedió y entregó a la empleada. Luego se facilitó que soltara una pistola de 9 milímetros que portaba”, manifestó Arias.
Según vecinos, el sospechoso tenía dos años de no tomar licor, pero ayer sufrió una recaída.