Un extranjero, que tiene la condición de residente en el país, fue detenido como sospechoso de cobrar $100 (¢59.500) para sacar ilegalmente de territorio tico a una mujer de origen nicaragüense con su hijo de cinco meses, que es de nacionalidad panameña.
La captura la ejecutaron oficiales de la Policía Profesional de Migración (PPM) cuando el imputado, así como las víctimas, se encontraban en la parada de buses de Liberia, en Guanacaste, para trasladarse a la comunidad de Santa Cecilia de La Cruz.
El objetivo de las personas era pasar a pie la frontera con Nicaragua, por un paso no autorizado, informó la Dirección General de Migración y Extranjería.
Según el detalle de la información, la acción policial se desarrolló las tarde del domingo cuando agentes de Migración observaron en la parada de buses Pulmitan de Liberia, en una actitud muy extraña, a una mujer que cargaba en su brazos a un bebé.
Los oficiales se acercaron y al pedirle los documentos de identificación determinaron que ella se encontraba en condición migratoria irregular en el país. Asimismo, de que su hijo de cinco meses de edad era de nacionalidad panameña y había sido sacado de manera ilegal de esa nación.
La mujer, quien es de apellidos González García, dijo además, que ella había pagado $100 a un hombre para que la sacara de territorio costarricense, para lo cual caminarían por trillos de varias fincas.
Precisó que la idea era abordar un bus en Liberia y trasladarse hasta Santa Cecilia y ahí seguir a pie.
Los agentes de Migración lograron ubicaron a la persona que se encargaría del traslado, que fue identificado como de apellidos González Valle.
Asimismo, las autoridades procedieron a coordinar con el Patronato Nacional de la Infancia (PANI) para que se hiciera cargo del caso bebé.
Gonzalez Valle fue presentado este lunes ante la Fiscalía Adjunta de Liberia, como implicado en el delito de tráfico ilícito de migrantes.
Según el artículo 249 de la Ley General de Migración y Extranjería (8764), se castiga con una pena de cuatro a ocho años “a quien conduzca o transporte a personas, para su ingreso al país o su egreso de él, por lugares habilitados o no habilitados por las autoridades migratorias competentes, evadiendo los controles migratorios establecidos o utilizando datos o documentos legales, o bien, falsos o alterados, o que no porten documentación alguna”.
Desde marzo, cuando Costa Rica cerró las fronteras, se han presentado 19 casos por tráfico ilegal de migrantes. Durante ese lapso, la Policía Profesional de Migración ha detenido 25 personas y ya se han logrado tres sentencias condenatorias.
Esta detención se realizó dentro de las acciones operativas que la Policía Profesional de Migración ejecuta en las diferentes zonas de Guanacaste, con el fin de verificar documentación migratoria de personas extranjeras, en virtud de la protección de la seguridad nacional.