“Soy un taxista formal de 34 años, gozo de buena salud y hago mucho ejercicio y estoy dispuesto a vender uno de mis riñones ya que soy padre de tres hijos y me gustaría dejarles algún día una casa propia.
”Ya he averiguado y sé que puedo vivir con un solo riñón. Sería mi responsabilidad y primero me garantizaría de que me paguen por adelantado; eso sí, no lo vendería por una cantidad pequeña de dinero. Me averiguaría bastante sobre la persona que lo recibiría.
”Me aseguraría que todo ocurra en una clínica reconocida, ya fuera dentro o fuera del país. De momento no he recibido llamadas desde hace mes y medio que publiqué el anuncio en Internet”, aseguró ayer Brandon, durante una conversación de nueve minutos que sostuvo La Nación con él, quien aseguró que habita en San José.
Él es uno de los costarricenses que están dispuestos a vender un riñón a cambio de sumas que van desde los $40.000 (¢20,1 millones) hasta los $200.000 (¢100 millones).
Así se anuncian en al menos tres páginas de anuncios clasificados en el país, donde indican que se trata de personas sanas, sin vicios y de buenas costumbres.
Entre los motivos que exponen los oferentes, figura la necesidad de obtener dinero de forma rápida, los problemas económicos generados por deudas y la falta de trabajo.
Por sus hijos. Otro caso es el de “Karla” , quien dice que desea vender su riñón a cambio de dinero.
“Soy del tipo de sangre RHO negativa, sana y no tengo vicios. Vendo mi riñón en $70.000 por el simple motivo de dejarles algo a mis tres hijos y que puedan pagar deudas”, dijo esta ama de casa en la página.
Para tratar de contactarla, dejó un número de celular que estuvo apagado ayer y un correo electrónico de Hotmail, al cual escribimos con la intención de conocer más sobre sus motivos.
Sin embargo, no respondió por ninguno de ellos.
Otro de los que ofrecen su riñón se identificó en la página solo como “Carlos” y dejó claro el 29 de agosto del año pasado que decidió deshacerse de su riñón debido a que tiene serios problemas económicos.
“Hola. Tengo 18 años, hasta el momento he sido sumamente saludable. Nunca he tenido ningún padecimiento grave. Vendo un riñón y estoy dispuesto a realizarme pruebas y esas cosas. El precio es de $205.000. Soy A Positivo y me pueden escribir a mi correo”, indica.
En ambos testimonios, otra persona de apellido Esquivel aseguró estar muy interesado y les solicitó la manera de cómo contactarlos.
Mejor por correo. La mayoría de oferentes son oriundos de la Gran Área Metropolitana y prefieren ser contactados por medio de un correo electrónico particular.
El martes, la Fiscalía contra la Delincuencia Organizada, en coordinación con el OIJ, arrestó al nefrólogo Francisco Mora Palma, de 63 años, como sospechoso de integrar una red que traficaba órganos entre Costa Rica e Israel, país que negó tales aseveraciones por medio del Ministerio de Salud Pública.
Ese día también fue arrestada la oficial de Fuerza Publica Mauren Cordero Solano, de 32 años, quien figura como sospechosa de reclutar posibles donantes de órganos.
Ambos descuentan seis meses de prisión preventiva en las cárceles de San Sebastián, y el centro para mujeres El Buen Pastor, en San Rafael Arriba de Desamparados, en San José. Durante el operativo se allanaron clínicas privadas, casas y un hospital público.