Los actos vandálicos registrados en las últimas horas empujaron a comercios situados en el cantón central de Limón a cerrar sus puertas antes de que anocheciera, según constató La Nación.
Tiendas de zapatos, comercios, restaurantes y hasta supermercados decidieron cerrar sus puertas antes de la hora habitual.
Lo mismo hizo el edificio de los Tribunales, que ante “múltiples amenazas”, se vio obligado a suspender servicios desde las 3 p. m., según confirmó el Poder Judicial. Este jueves abriría al público en horario normal.
Mientras tanto, los pocos conductores que se observaban al final de la tarde se desplazaron a las principales gasolineras con la intención de cargar combustible.
El principal temor es que este jueves amanezcan los tanques sin las suficientes reservas.
Una de las gasolineras en las que se acabó el combustible desde las 5 p.m. fue el centro de servicio Hayling, situada a la par de la gran terminal Caribe.
En el servicentro Delta se prevé que el combustible se acabe en las próximas horas, según el testimonio de los propios pisteros.
Por su parte en las gasolineras Penshurt y Home Creek, en Talamanca de Limón, las largas filas de vehículos y motocicletas son constantes desde la tarde. Allí también se prevé que los tanques amanezcan sin combustible.
En horas de la madrugada de este miércoles, un grupo de vándalos irrumpió dentro del supermercado Maxi Palí de Limón, de donde sustrajeron diversos electrodomésticos.
La Fuerza Pública logró la detención de 16 sospechosos, los cuales en su mayoría tapaban sus rostros con camisetas.
El ministro de Seguridad Pública, Michael Soto, manifestó que entre los detenidos hay algunos con historial delictivo, quienes trataron de causar conmoción en la provincia.
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