Su agudo olfato le permitió localizar el cuerpo de una niña de dos años que había sido arrastrada por una cabeza de agua en Bijagua de Upala.
Luego de olfatear a lo largo de un tramo de 800 metros con sedimento, Athos emitió una señal inconfundible que alertó a su oficial guía de que había encontrado algo.
A las 5:20 p. m. de aquel 26 de noviembre del 2016, maquinaria pesada logró rescatar los restos de la menor, una de las víctimas del paso del huracán Otto por Costa Rica.
Esta es una de las tantas misiones que desempeñó este pastor belga malinois en la Unidad Canina de la Dirección de Unidades Especializadas de la Fuerza Pública.
Los miembros de dicha unidad lamentan hoy la partida de Athos, que falleció el pasado fin de semana a la edad de ocho años y por causas naturales.
El perro ya estaba retirado, pero sus hazañas dejaron huella en muchos corazones. Por ello, el Ministerio de Seguridad Pública decidió rendirle un homenaje público.
“Es este un día importante para recordar a este héroe canino que nos abandonó y donde añoraremos su partida. Su trabajo junto al del oficial guía es inolvidable, lo vimos siempre laborar en situaciones de rastreo, así como en el huracán Otto, logrando con su nariz traer paz en medio del dolor de muchas familias", recordó el Ministerio en un comunicado de prensa.
Athos era un perro enérgico y voluntarioso. Nació en el 2008 y estaba especializado en la búsqueda de restos humanos.