Las cinco décadas del avión Caribú, el de mayor tamaño que tiene el Gobierno costarricense, dificultan encontrar el repuesto de uno de los motores recién instalados que se dañó hace más de un mes cuando la nave sobrevolaba Barra del Colorado, en Pococí, Limón.
El 24 de junio, ese avión del Ministerio de Seguridad Pública tuvo que aterrizar de emergencia, con 17 policías a bordo que realizarían un relevo en la zona. El hecho ocurrió porque el motor nuevo del ala derecha presentó fallas mecánicas.
Oldemar Madrigal, director de Vigilancia Aérea, señaló que la Cooperativa Autogestionaria de Servicios Aeroindustriales (Coopesa) instaló los dos motores nuevos, para lo cual se hizo una inversión de $200.000 en total, y ya se aplica la garantía.
La asesora legal de Vigilancia Aérea, Ivonne Murillo, confirmó que Coopesa realiza la búsqueda del motor en Estados Unidos, Canadá y Australia, pero hay dificultades por ser un modelo antiguo.
El primer Havilland Canada DHC-4 Caribou voló por primera vez en 1958. Este tipo de aviones se utilizó en operaciones militares, por ejemplo, en la Guerra de Vietnam, pero ya fue retirado y quedan pocos. El Caribú del Ministerio de Seguridad Pública es modelo 1964.
Sin fecha. ¿Cuánto tiempo más estará varado el Caribú en el aeródromo de Barra del Colorado? La respuesta es incierta.
Murillo explicó que desde el 25 de junio (un día después de la falla del avión), Coopesa se hizo cargo de revisarlo y hacer pruebas. Desde entonces, se busca el motor nuevo.
Sin embargo, la vieja aeronave no puede ser trasladada de vuelta a Base Dos, en el aeropuerto internacional Juan Santamaría, antes de que se le instale el repuesto.
De acuerdo con Murillo, el Caribú utiliza dos motores R2000-7M2, marca Pratt & Whitney.
Además, explicó que la instalación del otro motor se hará en Barra del Colorado y, posteriormente, habrá un vuelo tipo ferri; es decir, sin pasajeros y con mecánicos para posicionar el avión en la base de mantenimiento de Coopesa.
“El avión se trae acá (al aeropuerto Juan Santamaría) con el motor nuevo intercambiado y aquí se hará una inspección minuciosa para saber si existe un daño adicional. Se supone que el motor fue lo único que tuvo problema.
“Se hará el intercambio y las pruebas para estar seguros de que esté funcionando bien”, manifestó Oldemar Madrigal.
La compra de ese nuevo motor está cubierta por una póliza de responsabilidad civil, establecida en la garantía del avión ante el Instituto Nacional de Seguros (INS), detalló Ivonne Murillo.
Según añadió, esa póliza de la garantía es distinta de la que cubre a toda la aeronave en caso de algún siniestro, la cual está tasada en el INS por $700.000.