Siete miembros de una presunta banda narco, entre quienes figuran un matrimonio, su hija y un tío fueron detenidos ayer por la Policía de Control de Drogas (PCD), en Rincón Grande de Pavas.
La captura se logró luego del allanamiento de cuatro viviendas y en las cuales se decomisaron cerca de ¢2 millones en efectivo y 1.654 dosis de crack.
En las viviendas se encontraron además tres armas de nueve milímetros y dos armas hechizas, calibre 22.
Detenidos. Los presuntos líderes de la banda son un hombre de apellido Arroyo, de 24 años, y su mujer, de apellido Maroto, de 35.
Según la PCD, Maroto tiene antecedentes por narcotráfico, portación ilegal de armas, robo y hurto simple. Arroyo había sido apresado una vez por agresión calificada y robo agravado.
La hija de Maroto, de 22 años, al parecer era quien almacenaba ilegalmente la mercadería, de acuerdo con información de la Policía.
Un cuarto detenido es un hombre de 30 años y hermano de la colíder de la banda
Las autoridades también apresaron a un sujeto de apellido Fonseca, quien presuntamente almacenaba la droga para su venta y cuenta con antecedentes por homicidio, abuso sexual y robo agravado.
Los últimos dos detenidos son dos hermanos de apellido Espinoza de 29 y 34 años, sospechosos de la venta de la droga.
La organización está ligada a la banda ‘Los Diablos’, y operaba en las cercanías de la Escuela de Rincón Grande de Pavas.
La Policía organizó el operativo para capturar a los sospechosos tras haber recibido varias denuncias anónimas al número 176.
En el 2010, las autoridades han desmantelado cerca de 88 organizaciones criminales dedicadas a la venta local de drogas, 39 de ellas son narcofamilias. En los últimos cuatro años, la PCD ha desarticulado 124 narcoclanes familiares.