Un total de 35.000 medicinas de contrabando fueron decomisadas, el pasado fin de semana, en un autobús procedente de Nicaragua.
El hallazgo lo hicieron oficiales de la Policía de Fronteras al revisar el bus en un puesto de control en carretera, en la entrada a Santa Cecilia de La Cruz, Guanacaste.
Allan Obando, jefe policial para la zona norte, dijo que los medicamentos, de diversa clase, venían en dos sacos.
Agregó que una mujer que tiene residencia en Costa Rica admitió que eran de su propiedad, y, cuando le consultaron por los permisos sanitarios y si había cancelado los impuestos, no aportó ningún tipo de documentación.
Obando manifestó que este tipo de decomisos se ha vuelto muy común en cantones fronterizos como La Cruz, Upala y Los Chiles, y que la Policía de Fronteras, con el propósito de proteger la salud de la ciudadanía, realiza todos los esfuerzos posibles para evitar posibles daños a los consumidores.
Precisó que muchos de los productos presentan irregularidades, pues no tienen fecha de vencimiento, el origen de la casa de fabricación es dudoso y, a veces, las etiquetas donde se consigna el nombre del medicamento son diferentes al producto que contienen.
El jefe policial hizo un llamado a los ciudadanos para que no compren medicinas a personas que no tienen autorización.