Matar a un joven de 22 años para robarle los tenis le costará a una pareja de asaltantes 30 años de cárcel, según dispuso ayer el Tribunal de Juicio de Cartago.
Los jueces responsabilizaron a Michael Castillo Rojas y a Jarsiani Ramírez Fallas de la muerte a puñaladas de Randy Montero Montoya, durante un asalto en la madrugada del 1.° de diciembre del 2008 en Los Llanos de Santa Lucía, Paraíso de Cartago.
La víctima fue abordada por los asesinos a eso de las 4 a. m. y recibió cinco puñaladas. Los ladrones, aparte de los tenis, se llevaron la billetera, tarjetas de crédito y ¢1.200 que el joven portaba en un monedero.
De acuerdo con la investigación policial, Castillo y Ramírez sacaron dinero de un cajero automático después del crimen y luego compraron empanadas y refrescos en una soda.
El arma homicida (un puñal con mango blanco) la dejaron en la entrada de Navarro, en Orosi de Cartago. Pena. El Ministerio Público pretendía para los hoy sentenciados una pena de 40 años de cárcel: 30 por el homicidio y diez por el robo.
El Tribunal condenó , además, a los homicidas al pago de ¢50 millones como indemnización.
La sala de debates estuvo atiborrada de público, al punto que varias personas se quedaron afuera. Hubo necesidad de reforzar la seguridad para evitar un incidente.
Los sujetos sentenciados residían en la misma localidad donde ocurrió el crimen.
A Montero –quien estudiaba en el Instituto Nacional de Aprendizaje para técnico en un centro de llamadas (call center)– lo atacaron en el momento mismo en que llegaba a su casa.
El muchacho recibió la mayoría de las heridas en el estómago y fue apuñalado cuando trataba de abrir el portón.
La Cruz Roja lo trasladó esa madrugada al Hospital Max Peralta, en Cartago, donde falleció.
“Mi hijo se graduaba el 16 de diciembre (dos semanas después del crimen). Con respecto a la sentencia, la conformidad evidentemente no puede llegar a la vida de uno.
“Lo único que llega es un espacio de tranquilidad de saber que, para la sociedad, hay dos sujetos menos en las calle que no van a hacer más daño”, comentó Ernesto Montero, padre de la víctima.
Los autores del crimen cayeron el 18 de diciembre durante un operativo del Organismo de Investigación Judicial (OIJ).