Panameño que se fugó de su casa no tenía custodia policial

Foráneo cumplía medida de vivienda por cárcel a 300 metros de la frontera

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Un panameño sospechoso de venta de drogas aprovechó la ausencia de custodia policial para fugarse de la casa de su madre en el barrio San Jorge de Paso Canoas, donde cumplía el arresto domiciliario concedido por el juez Vinicio Castillo Serrano, del Tribunal de Juicio de Corredores.

Castillo sustituyó la prisión preventiva y dictó la medida de casa por cárcel el 29 de abril, pero el 2 de mayo la Fuerza Pública local informó de que el sujeto, de apellido González, se había escapado de la vivienda.

El Ministerio de Seguridad confirmó ayer que la casa, ubicada aproximadamente a 300 metros de la línea fronteriza con Panamá, no tenía vigilancia permanente porque así lo pidió el Juzgado Penal de Corredores.

En una carta dirigida al jefe de la delegación policial de Paso Canoas, la jueza Diana Vargas Badilla solicitó a la Fuerza Pública que hiciera visitas frecuentes a la vivienda para constatar que González cumpliera con el arresto domiciliario. Ayer no fue posible localizar a Vargas.

La oficina de prensa de la Corte Suprema de Justicia dio a conocer que el Tribunal de la Inspección Judicial abrió el 4 de mayo una investigación contra Castillo por este caso.

La Fiscalía informó de que otra panameña, quien se fugó en el año 2009, también recibió arresto domiciliario por una orden de Castillo.

El juez aseguró ayer a La Nación que cuando dictó el arresto domiciliario para González, confió en que el imputado iba a respetar la medida.

“Consideré que era atendible. La mamá tenía mucho tiempo (de vivir ahí), él tenía su compañera, su hija, trabajaba aquí”, manifestó Castillo.

Agregó que no pensó en una custodia permanente para el sujeto en arresto domiciliario porque en ocasiones la Fuerza Pública alega falta de personal.

Sobre la investigación que abrió la Inspección Judicial en su contra, Castillo comentó que aún no había sido notificado, pero que no tiene nada que esconder.

El caso del panameño se inició el 6 de abril cuando el Juzgado Penal de Corredores le dictó dos meses de prisión preventiva. Ocho días después el Tribunal Penal de la zona anuló esa resolución.

Tras una nueva audiencia, el Juzgado volvió a dictar dos meses de prisión, pero el 15 de abril el Tribunal dejó en libertad al extranjero al considerar que el juez penal no hizo una buena fundamentación.

El hombre fue detenido días después y, tras otra solicitud de la Fiscalía, el Juzgado Penal de Corredores le impuso dos meses de cárcel por el peligro de fuga. El 29 de abril, el juez Castillo concedió la casa por cárcel.

Se fue. El 2 de mayo los oficiales de la Fuerza Pública llegaron a la casa de González a las 7:33 a. m., pero la madre del panameño les informó de que no estaba, explicó Enrique Arguedas, jefe de operaciones de la Fuerza Pública.

“Según el informe que me entregaron, la señora, al despertarse, notó que la puerta del cuarto de su hijo estaba abierta y que él se había ido”, añadió.

Entre el 29 de abril y el 1.° de mayo los policías visitaron el domicilio en siete ocasiones a horas diferentes para no se predecibles.

Francisco Segura, subdirector del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), comentó que por la cercanía de la vivienda con la frontera sur, lo más probable es que González huyera a Panamá.