Peñas Blancas (GNN). Un furgón que transportaba 55 recipientes con bultos de 19 kilos de tolueno –sustancia utilizada como diluyente de pintura– explotó ayer jueves a solo 100 metros de la línea fronteriza en Peñas Blancas. El vehículo estaba justo en la estación de fumigación de vehículos del lado nicaraguense, pocos minutos de haber cruzado la frontera costarricense.
Producto de la explosión murió calcinado el operador de la máquina de fumigación, un nicaraguense identificado como Jorge Alberto Torres Castillo –de aproximadamente 40 años– y vecino de la comunidad de Sapoá.
El hecho ocurrió a las 5:15 p.m. Los bomberos de la Estación de La Cruz en Guanacaste fueron los primeros en llegar a la escena. Al equipo se les unieron unidades de Rivas y de Liberia.
Según indicó el jefe de la estación de Bomberos de La Cruz, Carlos de la O, fue el motor de la máquina de fumigación que generó una chispa mientras se rociaba el furgón. Esto provocó que el material altamente inflamable se incendiara y explotara. Las llamas alcanzaron los 15 metros de altura.
De la O agregó que inicialmente tuvieron problemas para controlar el fuego, pues no hay hidrantes cerca del lugar donde ocurrió la explosión. No fue sino hasta que llegó el auxilio de los bomberos de Liberia que contaron con más líquido. También se utilizó espuma para controlar el fuego.
Al explotar el furgón también tomó fuego otro que estaba a la par, cargado con cables. Ninguno de los conductores de los vehículos se encontraban cerca del lugar.
La Cruz Roja de La Cruz también ayudó en las labores de atención de la emergencia.
Óscar Ilsana, médico del centro médico del Municipio de Cárdenas en Rivas, Nicaragua, que atendió la emergencia indicó que –además del fallecido– hubo dos personas que resultaron con quemaduras menores.
Producto de la explosión, la frontera del lado nicaraguense permaneció cerrada por varias horas.