Un nuevo intento de motín en el Centro Penitenciario La Reforma, en San Rafael de Alajuela, dejó dos reos con heridas leves.
La revuelta se produjo a las 2:30 p. m. de ayer en el pabellón de mínima seguridad, donde hay 1.700 presos, 700 más que la capacidad normal, admitió Fernando Ferraro, viceministro de Justicia.
Un contingente de 70 oficiales de la Policía Penitenciaria logró controlar en tan solo 10 minutos el tumulto pues desde la mañana se esperaba el amotinamiento en alguno de los pabellones.
Ferraro dijo que tenían el personal suficiente pues la Fuerza Pública colaboró con la custodia del perímetro y, además, había un equipo especial de choque del Organismo de Investigación Judicial (OIJ).
El lunes pasado otro motín en el ámbito de mínima seguridad dejó como resultado dos reos muertos.
Recuento. Durante la semana las autoridades de Adaptación Social recibieron informes de posibles revueltas y toma de rehenes durante las horas de visitas de ayer y hoy, por lo que se preparó un operativo de prevención.
En la mañana de ayer, la requisa fue más estricta, lo que provocó el malestar de algunos visitantes. El acceso ayer era para el ámbito de mínima seguridad.
Todo transcurrió con normalidad hasta 45 minutos después de que se procedió a sacar a los familiares y amigos de los presos.
Ferraro explicó que, tras la visita, por procedimiento los reos son trasladados al patio del recinto.
En ese momento dos internos, identificados como Cristian Villalta Rodríguez y Roberto Solís Sánchez, ambos de 30 años, iniciaron una riña con armas hechizas. Los dos resultaron con heridas en el abdomen. Villalta fue atendido en la clínica de La Reforma, mientras Solís fue trasladado al Hospital San Rafael, en Alajuela, principalmente para valoración.
Para Justicia, el enfrentamiento se debe a una lucha por liderazgo pues los dos implicados pertenecen a bandos contrarios.
El viceministro dijo que durante la semana fueron trasladados 150 presos internamente y a otras cárceles del país. Los movilizados son considerados cabecillas de bandas, lo que ahora genera un vacío en estas, según Ferraro.
Luego de la riña, la Policía Penitenciaria realizó una requisa dentro de ese mismo ámbito.
“Se decomisaron 60 armas hechizas, además de las 57 decomisadas en horas de la mañana, 30 botellas de chicha, ¢150.000 en efectivo, cinco celulares y cargadores de celular”, agregó Ferraro.
Según el viceministro, la gran mayoría de las armas hechizas decomisadas en la tarde las portaban los presos que participaron en el amotinamiento.