Policía ha decomisado 127 toneladas de cocaína en últimos ocho años

Informe del ICD afirma que trasiego puede financiar la corrupción y otras actividades criminales

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Del 2010 a este año, las autoridades han decomisado 127.000 kilos de cocaína, y este 2017 marcó el récord, con 27.000 kilos hasta hoy.

Un informe del Instituto Costarricense sobre Drogas (ICD) sobre la evolución del fenómeno de los estupefacientes en el país revela que la cuarta parte de esos decomisos se logró con ayuda del Convenio de Patrullaje Conjunto con los Estados Unidos.

Sin embargo, entre el 2015 y el 2016 hubo una baja en las incautaciones logradas con ayuda de las naves norteamericanas, lo que, según el documento, podría implicar un cambio en las estrategias de trasiego de las organizaciones narcotraficantes, que buscan evadir la vigilancia marítima.

Además del tráfico de coca mediante embarcaciones, las organizaciones narco usan vehículos livianos y pesados para mover la droga por vía terrestre, razón por la cual el Ministerio de Seguridad Pública ideó un plan escudo que pretende repeler el tráfico por aire, mar y tierra.

Michael Soto, jefe de Planes y Operaciones del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), dijo por vía telefónica que, aunque la mayoría de la droga decomisada iba en tránsito, la cocaína confiscada por tierra se ha incrementado, lo que revela la existencia de bodegas para almacenaje. Esto incide en el consumo local, ya que también se hacen pagos en especie, detalló Soto.

Cocaína, la más decomisada

El documento señala que aunque, la marihuana y el crack se consumen más que la cocaína, esta última es la que más se decomisa.

Como país de almacenaje y trasiego, también existe el riesgo de que los grupos narco puedan financiar diversas actividades criminales como la corrupción, dice el informe del ICD.

La principal ruta de la cocaína hacia el norte es por la vía marítima, y el litoral del Pacífico es de los más usados, lo que ha hecho que cantones costeros como Garabito, Puntarenas y Carrillo de Guanacaste, donde arriban turistas con poder adquisitivo alto, hayan desarrollado un mercado importante de drogas.

"Tenemos costas bastante amplias y, cuando la droga va en tránsito hacia el norte, algunas cantidades de esos alijos quedan en el país por diversas circunstancias", dijo Soto.

El jerarca destacó el hecho de que a veces las bandas narco dejan cargas en altamar, con radioboyas, por lo que otras organizaciones locales se dedican a "pescar" esa cocaína y venderla en nuestro territorio.

La población flotante de turistas que llega a lugares como Jacó lo han constituido como el punto donde más decomisos de coca por narcomenudeo realiza la Policía.

Uno de los efectos directos del paso de esa droga por el país ha sido la proliferación de ventas del crack, un derivado cuya penetración ha llegado a los rincones urbanos y rurales más recónditos del país, lo que genera un aumento en los homicidios relacionados con disputa de territorios para la venta.

En el 2016, la provincia de San José tuvo la mayor cantidad de operaciones policiales para decomiso de cocaína por narcomenudeo. Superó por más del doble a Guanacaste, seguida por Alajuela y Puntarenas.

Otro elemento del informe deja ver que, en los últimos años, la pureza de la cocaína incautada en nuestro país ha sido mayor.

Dicha característica permite conocer la procedencia del estupefaciente, así como establecer cuán letal puede ser para el consumo humano en casos de sobredosis.

En ese sentido, Michael Soto dijo que los estudios del Laboratorio de Ciencias Forenses del OIJ revelan que la pureza ronda el 92% y el 94%, medida típica de la que viene empacada de origen.

Generalmente, esta cocaína genera más ganancias. Cada paquete que pesa cerca de un kilo se diluye para bajar su pureza al 70%, y eso permite mayor lucro a los revendedores.