Una alerta sobre movimientos extraños de vehículos en una vivienda, en San Miguel de Naranjo, provincia de Alajuela, permitió a la Policía de Control de Drogas (PCD) decomisar un millonario cargamento de droga.
Las autoridades decomisaron 811 paquetes de cocaína, cada uno de ellos con un peso aproximado de un kilogramo.
Cuando la primer patrulla de la Fuerza Pública llegó al sitio, el conductor de un vehículo de doble tracción se dio a la fuga, por lo que comenzó una persecución hasta que se logró su captura a varios kilómetros del sitio.
Luego de realizar coordinaciones con la PCD, se gestionó con la Fiscalía el allanamiento y revisión del carro y la vivienda, lo que permitió dar con la droga que estaba oculta dentro de 15 maletines azules, en una habitación.
Por este caso se detuvo a dos personas, el conductor del vehículo que intentó huir, de apellido Otoya, de 25 años, y una mujer apellidada Fonseca, de 31.
El sujeto tenía antecedentes por la portación de un arma de fuego no permitida que se le decomisó en el 2020.
Parte de los paquetes de cocaína tenían un envoltorio negro con la inscripción X8 sobre un fondo blanco. Los otros paquetes eran blancos y cafés.
Cerca del cargamento estaba la carabina, que es un arma de fuego larga, parecida a un fusil, pero de menos potencia.
También se decomisaron dos cargadores, municiones de calibre 9 milímetros, así como ¢775.000 y $1.039.
En el mismo sitio, los perros adiestrados de la unidad canina también ayudaron a detectar 9,2 gramos de marihuana.
La Policía investiga la procedencia de la droga, así como si la casa era usada como bodega de algún grupo organizado y el destino final al que se dirigía la cocaína.
Los detenidos quedaron a la orden de la Fiscalía, lo mismo que la droga, las armas, municiones y el dinero decomisado.