419 kilos de cocaína llegaron a Barcelona desde Costa Rica

Los estupefacientes fueron detectados luego de que las autoridades españolas pasaron por el escáner una carga lícita de café costarricense

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Autoridades españolas confirmaron este lunes 4 de marzo el hallazgo 419 kilos de cocaína en un contenedor de café procedente de Costa Rica. La droga fue descubierta durante una inspección realizada por funcionarios de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria en el puerto de Barcelona.

Según los informes de la entidad española, el cargamento fue descubierto después de que el contenedor con 19.000 kilos de café costarricense fuera escaneado, lo que reveló la presencia de “bultos sospechosos de color negro y rojo”.

---

La carga completa fue enviada al almacén de logística, donde se descubrió que los bultos contenían 631 pastillas de cocaína retractiladas, con un peso total de 419 kilos.

Las pastillas retractiladas se refieren a bloques de cocaína empacados en una película termocontraíble que se adapta a una forma rectangular mediante el calor.

La información sobre el decomiso trascendió a eso de las 6 a. m., hora de Costa Rica, en medios como El Periódico, Cadena Ser, La Vanguardia y ABC de España, así como la agencia Europa Press.

La droga estaba empaquetada en varios bultos que no estaban camuflados y se colocaron cerca de las puertas del contenedor, utilizando el método conocido como “gancho ciego”. En este método, un miembro del grupo narco coloca la droga en un contenedor con carga lícita, y luego, al llegar a su destino, un cómplice tiene acceso al alijo antes de que sea inspeccionado por las autoridades portuarias. En ocasiones, según medios españoles, se cuenta con el apoyo de funcionarios portuarios.

De momento, no se reportaron personas detenidas por este caso.

---

Ante consultas de La Nación, la Fiscalía Adjunta Especializada en Delincuencia Organizada informó que el decomiso ocurrió desde el pasado 21 de febrero y se incautaron 419,4 kilos de clorhidrato de cocaína. El cargamento salió de puerto Moín administrado por APM Terminals.

Manuel Jiménez Steller, viceministro de Unidades Especiales del Ministerio de Seguridad Pública (MSP), informó a este medio que la Policía de Control de Drogas (PCD) inició la investigación sobre un contenedor que zarpó del Atlántico costarricense, al parecer, a finales de enero.

En el 2022, cada kilo de cocaína tenía un costo que rondaba los $6.000 (¢3 millones) en nuestro país, pero debido a la sobreproducción, el precio bajó el año pasado a $4.000. Sin embargo, en Europa, el precio se multiplica hasta superar los $27.000 (¢16,3 millones) por kilo.

Esto significa que la carga incautada estaría valorada, aproximadamente, en $1,7 millones, o ¢6.830 millones.

Operación Soberanía

El 13 de julio del año pasado, el presidente de la República, Rodrigo Chaves, inauguró dos escáneres en la Terminal de Contenedores de Moín, en Limón, la principal vía de salida de la producción costarricense.

En setiembre, en un acto público en Puntarenas, el mandatario aseveró que, desde que se colocaron los dispositivos: “no ha salido un kilogramo, una onza, ni un gramo ni un grano desde que lanzamos la Operación Soberanía. Los europeos están felices”.

Lo cierto es que, para octubre del año pasado las autoridades europeas habían detectado al menos 1,5 toneladas de cocaína que salieron de Costa Rica. Desde entonces, se desconoce el total de cargas decomisadas en el Viejo Continente.

Solo se sabe que uno de esos cargamentos, con 720 kilos de cocaína, se conoció el miércoles 11 de octubre cuando la prensa española confirmó el decomiso en Málaga. La droga iba en un contenedor con chatarra.