19 detenidos dejó el operativo que el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) realizó este jueves para desarticular una banda que se dedicada a la venta de drogas en los cantones de Guácimo y Pococí, en Limón.
La captura de los sospechosos se hizo efectiva gracias a 23 allanamientos en Las Brisas, Jiménez, Guápiles, Toro Amarillo, La Rita y Ticabán, en Pococí; así como en Río Frío de Sarapiquí, Guácimo y San José centro.
El director del OIJ, Wálter Espinoza Espinoza, calificó al grupo como "doméstico", pero con un alto grado de organización y estructura, que poco a poco abarcó nuevos territorios para la comercialización de estupefacientes, sobre todo de crack y en menor escala de marihuana.
"Es un grupo violento, que amenazaba, incluso tuvo alguna participación en la planeación y ejecución de robos agravados en San José (...), entre las personas detenidas hay uno relacionado a un homicidio. Ese homicidio está vinculado al tráfico de drogas. Parece que era miembro de un grupo rival, hubo enfrentamientos como parte del control de territorios" resumió Espinoza.
Para la Policía Judicial, al grupo también se le atribuyen amenazas e intentos de asesinato contra personas de bandas rivales.
Historia. Wálter Espinoza comentó que el rastreo de esta banda comenzó en junio del 2015, luego de que Gustavo Adolfo Fallas Carvajal, de 25 años, muriera tras recibir al menos siete balazos, cuando se encontraba en un puesto de venta de frutas y verduras en la ruta 32, a su paso por Guápiles.
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"Luego de este homicidio, donde muere un miembro de una banda rival, el OIJ asume la investigación y detecta que detrás de esto (el asesinato) había una organización criminal dedicada al tráfico de drogas", manifestó Espinoza.
Durante las pesquisas, la policía supo que los presuntos responsables del crimen eran dos hombres de apellidos Pérez Barahona (detenido este jueves) y Cooper Sanabria. Este último murió en el Hospital Tony Facio de Limón, luego de ser atacado a balazos el 13 de noviembre del 2015, cuando conducía un vehículo en Pueblo Nuevo de Limón.
Producto de la pesquisa, se determinó que el líder de la organización es un individuo de apellidos Wright Salazar, de 36 años. En la actualidad este hombre padece un problema físico derivado de un atentado contra su vida ocurrido en algún momento del 2015, aunque el OIJ no precisó la fecha.
Espinoza mencionó que los miembros de esta organización recibían altas ganancias pero no hacían obstentación de bienes. Explicó que no han podido determinar cuánta droga estaban comercializando al mes, pero hizo referencia a un miembro del grupo, a quien le decomisaron 800 gramos de cocaína.
"Eso droga era para procesar, para sacar crack que era el fuerte de ellos. ¿Cuántas dosis de crack se pueden obtener de 800 gramos?. Muchas", dijo.
Agregó que los miembros del grupo "no son suntuosos. Tienen bajo perfil. Sin embargo, cambian constantemente de bienes, con lo que gastan mucho dinero. Tienen una vida liberal. Usualmente dilapidan mucho dinero en cosas banales. Casi todos usaban vehículos, que están inscritos a nombre de terceras personas".
El director del OIJ dijo que en este caso todavía se investiga el tema de lavado de dinero, aunque advirtió que el grupo maneja la plata en efectivo.
Incluso durante los operativos se decomisaron ¢10 millones en efectivo y ¢4 millones en billetes de ¢20.000 falsos. Consultado Espinoza para qué sería ese dinero falso, respondió que los agentes investigaron el asunto y determinaron que en Pococí no hay denuncias de que alguien introdujera billetes falsos, por lo que se presume que esa plata era para realizar una compra de droga. "Para engañar al grupo rival y de alguna forma mofarse de la actividad que hicieron", agregó.
El despliegue policial comenzó este jueves a las 4 a. m. y se extendió hasta las 9 a. m.
La Policía Judicial identificó a los detenidos como de apellidos: Wright Salazar (36 años líder), Pérez Barahona (21), Moreira Castro (22), Espinoza Bustamante (31), Cerdas Solano (26), Cantillo Aguero (57 mujer), Amador Arias (18), Rodríguez Saballos (26), Rodríguez Barrantes (33), Romero Ortega (26), Zambrana Sequeira (42), Fuentes Barrientos (24), Juarez Barrantes (23), Zambrana García (22 mujer), Hernández Paniagua (30), Aguirre Quintero (26), Rodríguez Aguilar (18), Aguilar Rosales (29), y un menor de 17 años.
A los implicados se les atribuyen, preliminarmente, los delitos de tráfico de drogas, asociación ilícita y varias tentativas de homicidio. A Pérez lo relacionan, además, con un homicido calificado.
Uno de los detenidos (Rodríguez Saballos) es un oficial de la Policía Penitenciaria. A él fue a quien le decomisaron los 800 gramos de cocaína. El Ministerio de Justicia informó que desde hace varios meses habían presentado una denuncia al OIJ contra esta persona, pues presumían que se estaba dedicando a actividades ilícitas.
"Es un caso importante, exitoso, pues se desarticula una banda criminal de carácter doméstico, pero muy bien asentada en un área territorial importante. Al hacer análisis criminal determinamos que los crímenes en Guápiles tuvieron un incremento en los últimos meses debido al enfrentamiento de grupos. Si los debilitamos es probable que durante algún tiempo haya un poco de tranquilidad", concluyó Wálter Espinoza.