Mujer que mató a paciente con inyección sufre mal psiquiátrico

Sospechosa subió al cuarto piso para inyectar a víctima contra su voluntad

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Una auxiliar de enfermería pensionada por un mal psiquiátrico fue quien inyectó a una paciente terminal hospitalizada en el San Juan de Dios, quien falleció de un infarto pocos minutos después.

El hecho se produjo a las 11:15 a. m. en el salón de medicina de mujeres Lara, en el cuarto piso del Hospital San Juan de Dios.

La víctima, Lilliam Arias Prendas, de 55 años, padecía de insuficiencia renal (cuando los riñones no tienen la capacidad para eliminar los desechos) y había ingresado al centro médico el lunes pasado en la tarde.

La sospechosa, quien permanece detenida a la orden del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), es Ángela Barrantes Moreno, de 63 años. Ella se graduó como auxiliar de Enfermería el 23 de enero de 1975 y se jubiló por un mal psiquiátrico –según el OIJ– cuando laboraba en el Hospital Nacional Psiquiátrico, en Pavas.

Ambas mujeres eran vecinas en la urbanización Contadores, en Calle Fallas de Desamparados, San José, donde conocidos dijeron que eran amigas.

Hechos. Max Apú, uno de los primeros oficiales de la Fuerza Pública en atender el caso, dijo que el incidente se produjo cuando personal hospitalario distribuía el almuerzo a los seis pacientes del cuarto donde permanecía Arias Prendas en cama.

“Lo que nos dicen es que ella, una mujer vestida de blanco, anduvo dando vueltas. Luego se fue al baño y esperó a que Arias estuviera sola para acercarse. Ellas hablaron no sabemos qué, pero le puso la inyección y se fue de nuevo al baño, donde personal de seguridad del Hospital la detuvo”, explicó.

Francisco Segura, director interino del OIJ, declaró, por su parte, que pacientes dijeron a investigadores que la mujer fallecida se opuso al procedimiento que le hacía la mujer vestida de blanco.

Agregó que fue por esa razón que las otras convalecientes alertaron de la situación.

“Este es un caso de abordaje científico forense. Hay que determinar qué causó la muerte. Ella fallece por infarto, pero hay que ver si el cuerpo tiene alguna sustancia y si esa sustancia podría generar el infarto. Se decomisó una jeringa y otras cosas. Bueno, hay que ver qué sustancia tiene la jeringa, y las otras cosas. Todo eso lo debe determinar Toxicología”, señaló.

Agregó que, paralelamente, a la imputada se le debe valorar en medicina legal el grado de incapacidad psiquiátrica.

Francisco Segura dijo que también se debe investigar un posible móvil, para lo cual los agentes judiciales van a trabajar en cuanto a las dos mujeres. Colaboró el periodista Ferlin Fuentes