Caldera, Esparza (GNN). Por segunda ocasión en menos de dos semanas, la marea afectó el paso de vehículos por la carretera en el sector de Caldera, donde también quedaron casas afectadas el pasado 4 de agosto.
Las olas alcanzaron los 3 metros de altura, la tarde de hoy miércoles, las cuales afectaron y mojaron a más de uno que se detenía para observar la magnitud de las olas.
“Vine con mi familia y mi hija a pasear y ver el oleaje, pero nos llevamos una sorpresa ya que nos acercamos mucho y la fuerte ola nos mojó todos. Es la primera vez que veo el mar tan bravo”, comentó Bernal Chinchilla, vecino de Tibás.
Unas tres familias que aún no salen de sus casas también se vieron afectadas por segunda vez, por lo que tuvieron que correr para sacar las pertenencias y colocarlas en la ciclovía. Esto no fue obstáculo para que ellos cocinaran. Marielos Montero se hizo una olla de carne casi en la carretera.
“Esto es un gran problema con el que tenemos que lidiar, sin embargo tuvimos que cocinar entre los vecinos casi que en la calle para así sustentar mientras todo llega a la calma”, comentó Montero.
El paso sobre la carretera se vio interrumpido por lapsos cortos, ya que para que no se hicieran grandes presas, oficiales de tránsito habilitaban el paso cuando no se salía el mar.
Los personeros del Instituto Mixto de Ayuda Social (IMAS) y de la Comisión Nacional de Emergencia fueron al sitio para ayudar a las pocas familias que se vieron afectadas.
“Estamos presentes para ayudar a las ultimas familias que se encontraban y que fueron afectadas. A estas se les dará la ayuda como se les dio a las otras familias afectadas en la marea pasada”, señaló María Guzmán, Presidenta del IMAS.