Un menor de cuatro años murió ayer carbonizado cuando se produjo un incendio en su casa, ubicada en el sector conocido como Las Gradas de Gaviota, en barrio Cuba, San José, a las 6:55 a. m.
El siniestro ocurrió luego de que el padre del menor, según la Policía Judicial, lo dejó encerrado en la vivienda mientras llevaba a su otra hija, de ocho años, a la Escuela Omar Dengo, ubicada a 500 metros del inmueble.
En ese momento, la madre del pequeño estaba en su lugar de trabajo, en Montes de Oca. El padre labora de noche.
De acuerdo con los investigadores de Bomberos, un cortocircuito en la sala de la casa generó las llamas, que consumieron cinco viviendas más y dañaron otra en forma parcial.
El área afectada es de 576 metros cuadrados; 20 adultos y nueve niños perdieron su casa.
Auxilio. Rebeca Cambronero, vecina del niño, dijo que ella intentó salvarlo cuando se percató de que el pequeño estaba solo.
Ella vive frente a la vivienda del infante ahora fallecido y contó que se acercó a la puerta de la casa, pero estaba con llave. Según dijo, podía escuchar al niño.
“(El menor) estaba muy cerca de la ventana porque yo lo escuchaba, pero yo no podía entrar ni tampoco verlo. Entre varios vecinos derribamos la puerta, y se nos vino una llamarada; no pudimos hacer nada”, contó.
El cuerpo del menor quedó tendido a un metro de la entrada de la vivienda.
Las autoridades judiciales se encargaron de realizar el levantamiento del cuerpo para llevarlo a la Medicatura Forense.
Los Bomberos tardaron cinco minutos en llegar al sitio tras la llamada de alerta. Los apagaincendios controlaron las llamas en 14 minutos.
Ronny Luna, del Cuerpo de Bomberos, indicó que a 400 metros del sitio había un hidrante que funcionó bien.
Al sitio acudieron cuatro unidades extintoras, un cisterna y una de rescate.
En lo que va del año, tres personas han fallecido debido a las llamas.
Según el reporte de Bomberos, en el 2011 ya hubo 375 incendios; 20 ocurrieron este mes.