Jueza deja libres a 6 menores acusados de quemar albergue

Estimó que no había pruebas, y los devolvió bajo la custodia del PANI

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El Juzgado Penal Juvenil de Alajuela dejó en libertad a seis de los siete menores acusados de causar un incendio que dejó inhabitable el albergue del Patronato Nacional de la Infancia (PANI) en La Mandarina de Alajuela.

La decisión la adoptó la jueza Tania Sánchez Rodríguez, al considerar que el Ministerio Público no aportó pruebas para imponer medidas restrictivas de la libertad, y, por eso, de nuevo los puso bajo custodia del PANI.

La oficina de prensa del Poder Judicial informó de que la jueza solo dictó dos meses de detención provisional para un muchacho de 16 años. Este quedó a la orden de Adaptación Social, que lo remitió al centro de menores Zurquí, en San Luis de Santo Domingo de Heredia.

Inmediatamente, el PANI advirtió del riesgo de reiteración delictiva de los menores, pues se informó de que todos los centros de la entidad son abiertos y no tienen medidas de contención.

Antecedente. Los menores implicados en este caso son, según el PANI, personas en conflicto con la Ley Penal Juvenil, con adicción a las drogas y que irrespetan las normas y límites dictados por personas adultas.

La entidad atribuyó a estos mismos jóvenes causar, el 15 de diciembre, un disturbio en el albergue de La Mandarina, donde pintaron paredes, rompieron vidrios y ventanas y quemaron expedientes, entre otros daños. El PANI señaló que las reparaciones del inmueble costaron ¢30 millones.

Posteriormente, a los jóvenes se les atribuyó amenazar a los funcionarios responsables del centro, y, el pasado fin de semana, se les vinculó con el lanzamiento de piedras desde el muro del albergue que afectaron seis buses de la empresa Transtuga S. A. Los vidrios de las unidades resultaron rotos.

Asimismo, vecinos se quejaron, pues los menores, al no tener contención, salían a cualquier hora del centro y se sentaban a esperar peatones a los que, presuntamente, asaltaban y amenazaban. También se les atribuyó meterse a las propiedades cercanas, de donde, al parecer, sustrajeron bienes.

Quejas. El PANI indicó que, cuando la jueza dejó en libertad, ayer a las 5:30 a. m., a los seis menores y los puso bajo custodia del PANI, de una vez los sacaron del edificio de los Tribunales de Alajuela.

Los adolescentes no esperaron a que llegara un microbús de la entidad para recogerlos, sino que se fueron a pie al barrio San José.

“Ellos mismos se brincaron las mallas del albergue en calle Flores (en el barrio San José) y se metieron a ese nuevo centro”, manifestó Fanny Cordero, vocero de prensa del PANI.

Mientras tanto, el Ministerio Público informó de que la Fiscalía Adjunta Penal Juvenil acusó a los siete jóvenes –de entre 16 y 17 años de edad– de dos delitos: incendio agravado (se agrava por poner en riesgo la vida de personas) y daños agravados.

La Ley de Justicia Penal Juvenil dispone que un menor culpable de incendio puede descontar cárcel hasta por 15 años.

La Fiscalía, tras conocer la resolución del Juzgado Penal, anunció que valora la posibilidad de presentar una apelación, pues se considera que en la acusación se presentó abundante prueba para estimar a los menores como relacionados con los hechos.

El Ministerio Público informó de que, en todo caso, se solicitó al Organismo de Investigación Judicial (OIJ) seguir recabando indicios para fortalecer aún más la acusación.