Cartago. Un individuo fue condenado ayer a descontar 27 años de prisión por mandar a matar a su suegro, para lo cual pagó ¢3 millones a dos sicarios.
La pena, que la dictó el Tribunal de Juicio de Cartago, es contra Adrián Arce Sánchez, al encontrarlo autor intelectual del asesinato del maestro pensionado Alfonso Madriz Gamboa, de 70 años, hecho ocurrido el 16 de marzo del 2012, en Rincón de Paraíso, Cartago.
En la sentencia, que fue dictada ayer, también se impuso 25 años de cárcel a Bernal Martínez Brenes, uno de los perpetradores del crimen.
Un tercer implicado, otro sicario identificado como Denis Maroto Moya, había aceptado el 31 de julio pasado, en un proceso abreviado, su participación en el asesinato, y, por tanto, se le condenó a 13 años y cuatro meses.
Móvil. De acuerdo con lo dispuesto por los jueces Marvin Arce, Carlos Cartín y Jorge Rojas, el fallecido Alfonso Madriz fundó una empresa dedicada a la construcción y reparación de viviendas, con el dinero ahorrado durante sus años de trabajo, Incluso, incorporó como socio a su yerno Adrián Arce, con quien compartía las pocas ganancias.
Sin embargo, por razones que no fueron hechas públicas, Arce tomó la decisión de mandar a matar a su suegro para quedarse con la empresa, que para la época del crimen iba a recibir millonarios pagos por dos contratos.
El juez Jorge Rojas le reprochó a Arce esa decisión, al argumentar lo siguiente: “Usted, Adrián, era algo así como el hijo que nunca tuvo don Alfonso. Él adquirió deudas, hipotecó bienes, para levantar una constructora, en donde se mantenían dos familias; de las ganancias o de lo que producía esa empresa, don Adrián mantenía a su esposa y cinco hijos”.
En tanto, el fiscal adjunto de Cartago, Róger Solís Corea, dijo sentirse satisfecho con el fallo. “Los jueces acreditaron la hipótesis acusatoria, cumpliendo con todas las garantías y el deber legal del proceso”, agregó.